Historia sin sentido

Day 05: ¡Corre! ¡Están locas!
Ya eran las 10 de la mañana y sorprendentemente las chicas ya estaban despiertas, pues la semana estaba por acabar y aun les faltaban algunas cosas.
-Bien, este es el plan – dijo Moka en tono de militar- primero cada quien desempacara y acomodara sus cosas. Después Mio y yo nos encargaremos de las cosas de la cocina y el comedor, mientras Taiga y Miku arreglan lasala, el estudio y los cuadros del pasillo. ¿Entendieron? –Volteo a ver a las chicas-
-¡Hai! –respondieron todas al unísono, para después corre casa quien a su habitación y empezar con la “operación final”.
Toda la mañana se la pasaron arreglando cosas, cajas, ropa, etc. Tan apuradas estaban que ni siquiera desayunaron, y para sorpresa de todas Taiga aún no se quejaba por eso. Al parecer,también estaba preocupada por las cosas que faltaban.
Fue una mañana muy pesada, pero a las 6:30 pm parecía que al fin las habitaciones habían quedado listas.
-Fiu… -suspiro Moka, mientras cerraba el armario- Espero que las demás hayan acabado también. –se estiro y después se dirigió al pasillo para inspeccionar las otras habitaciones-
En el pasillo se encontró una caja, pequeña y solitaria que notenía nombre.
-Ummm… no tiene nombre… ¿de quién será? –Prensaba mientras miraba extrañada el pequeño objeto- ¡Oh! Debe ser esa vergonzosa caja llena de mis calcetas de monos fluorescentes –dijo mientras se sonrojaba de solo pensar en eso, mientras se agachaba para tomar la caja, pero una voz aguda la detuvo-
-¡Oh, Ahí está! –Exclamo Taiga mientras se dirigía a la caja- No te preocupesMoka-san, esa caja es mía –sonrió en cuanto estuvo frente a ella-
-¿Eh? –Parpadeo confundida la peli-rosa- No Taiga, debe ser un error. Esa caja es mía
-Pero… estoy segura de que me falta una caja y es esta, además… tiene cosas personales
-¡Exacto! –Agregó Moka rápidamente- Muy personales. Enserio Taiga, esa caja es mía.
-Concuerdo, demasiado personales. Pero ¡es mía! –Contesto Taiga, empezando aperder la paciencia-
-¡No, te juro que es mía! –Moka cada vez se ponía más nerviosa- “¿Qué tal si Taiga intenta abrirla?” pensaba agitada.
-No. Esa caja tiene cosas mías… muy importantes y personales –“No puedo dejar que vea mi colección de figuritas de Corazón de Bombón” pensaba la castaña- Así que me la llevo -rápidamente tomo la caja y comenzó a caminar rápidamente rumbo a su habitación--¿Qué? ¡Aisaka! ¡La caja es mía! –Grito Moka enojada mientras alcanzaba a la castaña- ¡Dámela, tiene cosas personales! –Empezó a jalar la caja-
-¡Cosas personales MÍAS! –Taiga también jalaba la caja- ¡Y sabes que odio que me digas Aisaka! –Agrego enojada- ¡suenas como mi madre!
-¡No tendría que decirte así, si me dieras la caja! –Intento jalar más fuerte, pero aun así no lograba poseer el objeto--¿Por qué tendría que dártela? ¡Es mía! –Aseguraba la castaña mientras seguía jalando-
La discusión siguió por mucho tiempo más y cada vez el par de chicas elevaban más la voz, por lo que la verde aqua y la morena decidieron asomarse para ver qué pasaba.
-“Demonios… pelean de nuevo. ¿Debería intervenir? …. ¡no! Porque pasara lo mismo que con la puerta” –pensaba Miku asustada-
-“¿Deberíadecirle algo a Taiga-chan?.... mejor no, porque el resto del día estará triste, ya que según ella me pongo del lado de Moka. Entonces… debería… ¿decirle algo a Moka-san? ¡No!... ella podría hasta golpearme en su arranque de ira” –Pensaba Mio, mientras imaginaba las acciones dichas con muñequitos chibis-
-Lo mejor será que me desaparezca, así cuando vuelva ya estarán calmadas –Miku se sintió como ungenio ante tal idea- P-pero… no me puedo ir así como así… ¿Qué hago? –pensó mientras miraba alrededor-
-Creo que mejor me… voy –pensó Mio- pero… ¿con que excusa? –Dio un rápido vistazo a su habitación-
-¡ESO ES! –Dijeron ambas chicas al ver el montón de cajas que ambas tenían en sus respectivas habitaciones-
Como pudieron ambas tomaron el máximo de cajas vacías posibles y salieron de sus...