Hugo Quiroga El Tiempo del Proceso.Conflictos y coincidencias entre politicos y militares 1976-1983. Introduccion y Cap 1.

El tiempo del “proceso”. Conflictos y coincidencias entre los políticos y militares 1976-1983.
Introducción
Dictadura, Sistema Político y Legitimación
1) Analítico
Desde una línea argumental antitética se sostiene que los últimos golpes militares producidos en el cono sur 1973 y 1978 (Chile, Uruguay Argentina) tuvieron sus motivaciones profundas en la restructuración de la economía y lasociedad. La hipótesis adoptada requiere una estrategia analítica que privilegie la relación estado y sociedad antes que la utilización de los recursos que invocaban determinantes univocas y procure comprender la complejidad de los mecanismos sociales en la explicación de lasos fenómenos políticos.
La indagación que proponemos realizar en el presente trabajo está referida a un caso concreto, el argentino,acotado temporalmente al periodo 1976-1983 y encuentra en la investigación empírica la base de nuestra reflexión examinaremos el autoritarismo argentino desde el ángulo de la relación estado y sociedad, buscando un enfoque que nos permita articular esa relación en el interior del sistema político.
En consecuencia, proponemos estudiar el proceso militar surgido en marzo de 1976 en la dinámica dela relación que se articula entre estado y sociedad civil en el interior del sistema político.
2) El Sistema Político Argentino
Es sistema político constituido en argentina del siglo 19 experimenta un cambio esencial que modifica su funcionamiento al iniciar una apertura que da lugar a una restructuración democrática. La modernización se produce con el ensanchamiento del mercado políticointroducido por la ley Saenz Peña.
De aquí en más se estará en presencia de un sistema político abierto.
Con anterioridad, el poder de la clase dirigente descansa en un sistema político restringido que mantenía un mercado político semis – cerrado. “El control institucional” señala claramente la necesidad de transformación de una sociedad que mostraba su retraso en lo político mientras el país sedesarrollaba vertiginosamente en el terreno económico.
El cambio operado en la participación política es considerable y la bases del sistema se amplían progresivamente en los 4 años que trascurren entre la sanción de la ley Saenz peña y el triunfo de Irigoyen.
En una sociedad conflictiva como en argentina donde la discontinuidad institucional ha sido la característica del sistema político en los últimos 50años del estudio tanto de su funcionamiento como del de los diversos regímenes políticos que se implementaron merecen un esfuerzo y atención mayor en el campo de la investigación política. Hablar de discontinuidad institucional es una expresión que puede lugar a confusiones, sino se precisa el significado que aquí se le atribuye. Nuestra hipótesis es que la discontinuidad institucional iniciada enel 30 no puede ser tomado como una ruptura del sistema político, pues no existe discontinuidad por fuera del mismo y de sus posibilidades de trasformación. Por el contrario el sistema político argentina funciona en la realidad histórica a través de una articulación que combina en su estructura los gobiernos militares con los gobiernos civiles. Esa discontinuidad no produce del sistema político,por el contrario el corte no existe, y los nuevos actores políticos- las fuerzas armadas- se conforman como un componente necesario y complementario en el funcionamiento del sistema. Cada intervención militar genera drásticas modificaciones en el aparato institucional del estado de derecho y provoca las naturales convulsiones en la vida política nacional. La historia política argentina se debatedesde 1930 entre dos sistemas antagónicos, uno democrático y el otro autoritario. En todo caso lo que existe son dos polos antagónicos, el democrático y el autoritario, que conviven en el interior del mismo y único sistema.
La convivencia social de los argentinos es regulada por un sistema político que, en parte, es la expresión del conflicto de grupos sociales con intereses divergentes que no...