Incentivos de un estado por la muerte de inocentes.

Con la gran ofensiva militar que implantó el gobierno de Álvaro Uribe para exterminar a los grupos insurgentes, conocida como política de seguridad democrática, estableció incentivos a las fuerzasmilitares con el fin de aumentar la eficiencia y eficacia de esta Organización, y con la finalidad directa de acorralar a estos grupos subversivos y propinarle golpes significativos que lograrandebilitar su estructura militar. Lo anterior trajo como consecuencia los llamados “falsos positivos”, que se caracteriza por la inexplicable desaparición de personas que según distintas fuentes periodísticasy testimoniales abandonaban sus hogares por supuestas propuestas de trabajo, ejemplo dado el de la desaparición de 19 jóvenes ocurrida en el municipio de Soacha y aparecidos muertos en eldepartamento de Norte de Santander.

El éxodo terrorífico se mostró a la opinión pública, al presentarse muertes extralegales dadas por parte de funcionarios del ejército y que enfocaban su objetivo enciviles inocentes que posteriormente hacían pasar como guerrilleros muertos en combates, y así recibir una recompensa del estado, que consistían en honores, permisos, calificaciones a ascenso y recursosmonetarios, el cual materializaría una supuesta eficiencia de la fuerza pública. A pesar que esta serie de actos delictuales día a día son un caso de denuncia, muchos de estos han quedado impunes, debidoa que muy pocos casos han sido judicializados por factores como el miedo de las familias y el escaso compromiso del Estado para la efectiva persecución (investigación y juzgamiento) de estos actoresque aunque legitimados por una causa, desbordaron derechos fundamentales constitucionales como la vida y la integridad personal, en personas que no eran el objetivo de esta guerra interna (Sociedadcivil).

Es por ende importante mencionar un lema pertinente “El premio a una obligación legal, es una propuesta a la violación de los limites”, la cual es la forma más obvia de explicar estos...