Interpretación de los sueños, Sigmund Freud

Baremblitt, G., et al. (1979). Lección 2, en La interpretación de los sueños, una técnica olvidada. Helguero editores: Argentina; pp. 21-35.
Lección N° 2
En esta clase me propongo repasar sumariamente (dado que el propósito central de este curso no es teórico sino técnico), las definiciones freudianas de los conceptos básicos necesarios para explicar la naturaleza de un sueño. La finalidadde estas puntualizaciones radican estrictamente en poder fundamentar las maniobras técnicas de la interpretación de los sueños que reseñaré más adelante.
Para su ampliación, según lo ya aconsejado, consúltese el vocabulario de Psicoanálisis de Laplnche y Pontalis.
Apelaré a una nueva fórmula que me parece, como la anteriormente expuesta, pedagógicamente eficaz, aunque demasiado extensa; enpsicoanálisis: “Un sueño es una vivencia subjetiva de la conciencia onírica en la que aparece como una trama de representaciones sensoriales y afectos (el contenido manifiesto) que es objetivado luego por el soñante en una narración (el discurso onírico) ; este contenido manifiesto el es resultado de un trabajo de transformación y disfrazamiento (elaboración y deformación oníricas) por el cual unconjunto de ideas o pensamientos inconscientes (ideas latentes – contenido latente) que han sido preconscientes en una coyuntura vital del sujeto en los días previos (situación pre-onírica) y fueron reprimidas por haber sido cargadas por la fuerza de los deseos inconscientes, son expresadas en forma sensoriales (alucinaciones oníricas) durante el dormir, debido a que peculiares condiciones del aparatopsíquico (inmovilidad motriz y privación perceptual) permiten un aflojamiento de la censura y un funcionamiento según pautas arcaicas (regresión). Agregaremos que los elementos sensoriales con los que se construye el contenido manifiesto son residuos perceptivos de la situación pre-onírica o anteriores (retos- diurnos), percepciones incidentales durante el dormir, de los receptores proximales odistales.
Vayamos ahora por partes: Creo que se sigue pertinentemente a Freud (quien rescataba de Aristóteles aquella fórmula por la cual el sueño es “el pensamiento del durmiente”) si se dice que es una vivencia de la conciencia onírica. Conciencia ésta muy peculiar, pero ámbito de lo real psíquico al fin, que se reconstruye a partir de un campo de efectos, la objetivación de su relato pero queno debe ser ni autonomizada ni salteada en beneficio del discurso onírico ni del contenido latente. Recuérdese que analizamos el sentido de un discurrir, libre asociativo o no, en el que influye la dimensión referencial, es decir un estado de cosas externo al discurso, que en este caso es, en parte, un sueño “soñado”, es decir vivenciado por el soñante como una acción sensorialmente presentadacompuesta de representaciones y afectos.
El contenido manifiesto designa al sueño antes de haber sido sometido a la investigación analítica, tal como se presenta al sujeto soñante que efectúa la narración del mismo. Considero conveniente insistir en que se trata del sueño tal como es experimentado y recordado y luego, además, tal como es narrado. Estos tres momentos no deben ser confundidos entresí. No me opondría a llamar discurso onírico a la narración de un sueño, siempre que no se olvide que en este caso “discurso” incluye todas las formas posibles de relato y sus respetivos mecanismos de significación. Recuérdese la pintoresca aclaración en forma de historieta gráfica que figura en el libro “La Interpretación de los Sueños”.
El contenido latente es el conjunto de significaciones a lasque conduce el análisis de una producción del inconsciente, especialmente el sueño.
Una vez descifrado el sueño no aparece ya como una narración formulada en imágenes (o como se ha tratado de sinonimizar: icónica, figurativa, pictórica, analógica, imaginaria, etc.), sino como una organización de pensamientos de ideas que vectorizan deseos (en el modo llamado abstracto, digital, isomórfico,...