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Una mañana, al final de esa semana, el señor Bumble vio Sr. Sowerberry, el fabricante de ataúdes, fuera de la casa de trabajo. Sr. Sowerberry era un hombre alto ydelgado que siempre llevaba ropa de color negro debido a su trabajo. Él venía a menudo a la casa de trabajo debido a que muchas personas pobres murieron allí y así que él conocía muy bien el señor Bumble.
Los dos hombres comenzaron a charlar, y luego el señor Bumble señaló el aviso en la puerta casa de trabajo.
“Sr. Sowerberry, ¿sabe cualquier persona que quiera un niño - cinco libras? "
Sr.Sowerberry pensó por unos momentos.
"Creo que me lo llevaré Sr. Bumble . Necesito un chico para trabajar en mi tienda”.
Entraron a hacer los arreglos.
Esa noche, el señor Bumble abrió la puerta de labodega y le dijo a Oliver la noticia. Oliver dijo nada. Él acaba de sacar la tapa hasta los ojos para ocultar sus lágrimas, y siguió el señor Bumble por las calles para ir de compras del fabricante deataúdes.
Sr. Sowerberry les estaba esperando. Sólo había la luz de una pequeña vela así que la habitación era oscura y sombría. Un ataúd terminado yacía sobre una mesa en el medio de la habitación ylos lugares de la madera se pusieron de pie contra las paredes. Sr. Sowerberry sonrió a Oliver y luego llamó a su esposa.
“Sra. Sowerberry , ¿vienes aquí por un momento , querida? "
Sra. Sowerberryera una mujer pequeña y delgada con una cara enojada.
Oliver pensó que parecía un zorro. Ella lo miró y Oliver se inclinó cortésmente.
“Hmm ... es muy pequeño " , dijo, por fin.
“Sí, él es...
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