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“El diagnóstico local-barrial como instrumento de construcción
de políticas sociales dirigidas a la inclusión social”






Introducción


Esta ponencia tiene como objetivo principal demostrar la posibilidad de vincular investigación académica y gestión social a través de un instrumento como el diagnóstico local-barrial. En particular, nos interesa señalar los aportes de calidadque la investigación social en el ámbito de las Universidades puede realizar ante lo que interpretamos como una preocupante debilidad de los diagnósticos frente a los profundos cambios sociales que vienen registrándose en las últimas tres décadas.

Al respecto, sostenemos que se hace hoy imprescindible introducir tanto en el debate académico como en el político el estudio de los efectosque el proceso de territorialización de la pobreza ha generado, delineando una diferente topografía social, con espacios sociales en los que se reúnen las desigualdades y donde se inscriben en la experiencia vital cotidiana y subjetiva, los patrones de inclusión/exclusión social. Atributos que los sistemas de indicadores sociales como el tipo de diagnósticos desarrollados apenas pueden alcanzar adescribir, toda vez que se considere la necesidad de trascender la jurisdicción, para distinguir localidades y barrios en sus detalles y contornos y así revelar una imagen hasta ahora bastante oscura y difusa.

La propuesta metodológica debe contribuir a la realización de una nueva política social dirigida hacia la inclusión social, es decir, orientada al fortalecimiento de una ciudadaníaplena, mediante acciones socialmente niveladoras y redistributivas en el acceso a bienes sociales, entendiendo por tales a aquellos que definen la capacidad de una población para funcionar en el conjunto social. Ha alcanzado consenso la idea del rediseño de una institucionalidad social y política que sea capaz de contener a la pluralidad de actores e intereses que constituyen el colectivo social(Carpio y Novacovsky, 1999)
Se trata de trabajar en favor de una política de umbrales básicos, junto a una política orientada al fortalecimiento de la identidad y el reconocimiento social, y una política que llamamos de ’segundas oportunidades’ (Krmpotic, 1999)


Asimismo, se pretende instalar el tema del diagnóstico en un nuevo contexto de análisis; es decir, desplazando el énfasis en ladimensión temporal, secuencial, para considerar la dimensión espacial del diagnóstico, que entendemos sustancial en momentos de transformaciones en las relaciones local/nacional/transnacional.



Finalmente, estos antecedentes nos permitirán elaborar una propuesta para el nivel local-barrial y su concreción a través de la construcción de mapas sociales[1] , en tanto resultado del trabajocompartido entre Universidades y los distintos niveles de gestión política local.



1. El diagnóstico

La relevancia del diagnóstico no deriva -en el marco de este análisis- de su papel en la secuencia de planificación, de la que sin dudas es una fase clave, sino particularmente de su importancia en el diseño de políticas.
En este sentido, las decisiones políticas requieren responder a trespreguntas: ¿cuáles son las condiciones actuales?, ¿qué metas tenemos? y ¿cuáles son los mejores medios para alcanzarlas?. Siendo las respuestas a esta última las más instrumentales y casi dominio de los expertos, y aquellas vinculadas a las metas, unas de carácter esencialmente normativo y resultado del debate político, entendemos que es el primer interrogante el más difícil de responder.
Este aspectonos enfrenta al diagnóstico sobre las necesidades, que involucra no sólo las apreciaciones de los técnicos y profesionales, sino fundamentalmente de las personas, familias, y organizaciones que desenvuelven desde sus vivencias y experiencias individuales y colectivas, diversas perspectivas y opiniones sobre el estado de situación que viven.
Diagnosticar supone captar las evidencias directamente...