La aplicaion de la remision

La Aplicación de la Remisión



DEDICATORIA

INTRODUCCION

CAPITULO I.- La remisión en el marco jurídico latinoamericano

CAPITULO II.- La remisión como instrumento eficaz para recuperar a los adolescentes en conflicto con la ley

CAPITULO IIII.- La remisión en el contexto jurídico peruano

3.1.- Concepto
3.2.- Aplicación de la remisión
3.3.- Requisitos para la aplicación dela remisión
3.4.- Ejecución de la remisión
3.5.- Procedimiento para la aplicación de la remisión
3.6.- Principales inconvenientes para la aplicación de la remisión


CONCLUSIONES

ANEXOS

BIBLIOGRAFIA

LINKOGRAFIA









dedicatoria
















Dedicamos este trabajo monográfico a todas las personas que nos han apoyadodurante toda nuestra vida.

















Las personas que luchan por
alcanzar la justicia, ofrendando
hasta su propia vida.




















INTRODUCCION


En nuestro Ordenamiento jurídico encontramos al Código de los Niños y Adolescentes el cual no es malo, sólo que no se pone en práctica. Uno de los problemas es que no hay una “real defensade los menores” como por ejemplo de parte de los abogados de oficio, quienes se enteran del caso sólo momentos antes de la audiencia con el juez, y sugieren a los chicos aceptar el hecho para ir a Maranga con la pena disminuida. (La presencia de los abogados de oficio se debe a que la mayoría de los menores proviene de hogares muy pobres).

Los distintos operadores de justicia deben saberque la posibilidad de que los menores vuelvan a delinquir es más alta si se les envía a Maranga que si se trabaja con la familia, y se les brinda educación y empleo”,

Es por ello que a los adolescentes se le debe brindar oportunidades para mejorar sus conductas y eso se puede realizar a través de la remisión, tal como lo establece el Art. 206 del CODIG del Niño y el adolescente.


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La remisión en el marco jurídico latinoamericano














Cuando estudiamos el instituto jurídico de la remisión y su aplicación en los nuevos ordenamientos jurídicos latinoamericanos en materia de niñez y adolescencia, tendemos a considerarlo una figura novedosa, de reciente incorporación a nuestro derecho y, por lo tanto, depaulatina aplicación, a la espera de una aceptación jurisprudencial progresiva en el marco de un sistema legal que, básicamente, no estaría preparado para ello.

Pero a poco que profundicemos en la rica historia del derecho de menores del continente americano, advertimos que, en realidad, la posibilidad de tratar los casos de transgresiones adolescentes con respuestas distintas a las de la ley y elproceso penales, no sólo no es ajena a nuestras costumbres, sino que hemos sido pioneros en su formulación.

Muchos son los ejemplos de la época en tal sentido. Ya en diciembre de 1954, por ejemplo, en el mensaje de elevación de la que a fines de ese mes sería la Ley de Familia Nº 14394, el presidente de la República Argentina sostenía, refiriéndose a la derogación de los artículos del CódigoPenal que se ocupaban de los menores (hasta ese año la incriminación penal, por el código de 1921, se admitía a partir de los 14 años): “Extraer a los menores de dieciséis años del Derecho Penal es un postulado fundamental de la doctrina nacional”.

Quizás la diferencia del criterio latinoamericano con el dominante criterio anglosajón, de crudo retribucionismo penal en materia de niñez, se expresódel modo más claro en las sutiles pero no menos evidentes diferencias de formulación entre el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, forma operativa de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU, votado junto con su similar de Derechos Económicos, Sociales y Culturales en diciembre de 1966, y su similar para la región, la Convención Americana sobre Derechos Humanos,...