La Educación Como Formación De virtuDes

“La educación como formación de virtudes”








4 de Junio de 2008




“La contribución que la escuela ofrece, junto con la familia y subordinada a ella es y sigue siendo indispensable en la transmisión de los valores de la cultura[1]".

Una cosa es lo que el hombre es por su naturaleza, y otra, lo que puede llegar a ser según cómo actúa a lo largo de su vida.

Si partimos dela definición de Santo Tomás de la educación: “Conducción y promoción de la prole al estado perfecto del hombre en cuanto hombre, que es el estado de virtud”, podemos decir que educar sería el desarrollo pleno de la esencia humana, que las facultades de la persona alcancen su máxima expresión.

“La educación es un fenómeno específica e inequívocamente humano, y su necesidad puede aclararse alconstatar que el hombre es un ser que necesita aprender a ser[2]”.

¿Por qué el hombre necesita aprender a ser? El ser humano, al nacer, es virtuoso en potencia, es decir, tiene la posibilidad de desarrollarse como tal, pero no es capaz de hacerlo por sus propios medios. Santo Tomás, en su definición nos habla sobre la “conducción y promoción de la prole” ya que la tarea como primeros educadorescorresponde a los propios padres. La escuela es, como dijo S.S Juan Pablo II, “junto con la familia y subordinada a ella”, un elemento indispensable para lograr en el educando este estado virtuoso. No sucede lo mismo con las demás especies y es por esto que la educación es exclusivamente humana. No podemos educar a una planta o a un caballo. El “hombre en cuanto hombre” es creado a imagen ysemejanza de Dios y las facultades del alma, la inteligencia y la voluntad, son las que forman el carácter virtuoso.

Cada ser humano tiene un modo diferente de actuar u obrar. Todas estas acciones va dejando en el alma una huella, para bien o para mal, según sea buena o mala su actuación. Las buenas acciones perfeccionan al hombre, y cuando esa acción buena se repite una y otra vez, crea en elhombre un hábito, una facilidad para actuar bien siempre en ese modo de obrar determinado. A esto llamamos virtud. Las malas acciones se convierten en malos hábitos y es a esto lo que llamamos vicio.

En la educación en las virtudes, la formación de una conciencia recta adquiere vital importancia, ya que es la que va a presentar el bien como bueno y preferible, y llevará a hacer el bien y evitar elmal de una manera habitual, es decir, a vivir la virtud, ordenando el momento oportuno para practicar el bien y evitar el mal, juzgando las opciones concretas y aprobando las que son buenas, atestiguando la autoridad de la verdad con referencia al Bien supremo[3].

Por esto mismo, la labor en la educación en virtudes debe llevar a formar en los niños y jóvenes una conciencia recta y una madurezque les conducirán a ser justos, responsables, trabajadores, exigentes consigo mismos, fieles a sus compromisos con Dios y con los hombres, etc. Podrán tener, como creaturas débiles por naturaleza, caídas momentáneas de debilidad en la vivencia de la virtud, pero su misma conciencia les ayudará a rectificar y a retomar el camino del bien.

Como plantea Aristóteles, el ser humano, está formadopor cuerpo y alma en una unidad sustancial y se ve sometido constantemente a impulsos que lo atraen en direcciones opuestas: por un lado, su parte material o sensible lo inclina fuertemente a la obtención de los bienes materiales; y por otro, su razón y su voluntad lo llevan a la búsqueda de la verdad y del bien. El alma se manifiesta a través del cuerpo y el cuerpo tiene vida gracias al alma.Ambos tienen igual importancia y por lo tanto es necesario desarrollarlas de igual forma.
Las virtudes actúan como un principio de unidad que permite al hombre integrar la razón y sentimientos, de modo que ambos puedan actuar en una justa medida, subordinando las tendencias instintivas inferiores a las tendencias que dicta la razón.

Es necesario diferenciar entre virtud y buena costumbre. La...