La pedagogìa del diàlogo como elemento que refuerza la inclusión

LA PEDAGOGÍA DEL DIÁLOGO COMO ELEMENTO QUE REFUERZA LA INCLUSIÓN


Por: DILIA ELENA MEJÍA RODRÍGUEZ
Docente de Prácticas Pedagógicas Investigativas

El presente escrito es una reflexión a partir de las conversaciones con los diferentes actores del proceso educativo en el marco del proyecto la creación de una cultura de paz desde la práctica pedagógica investigativa, parte del análisis delos actos de habla que permiten reflexionar en torno a la educación para la paz desde la pedagogía del diálogo.

-“¡Aunque pienso que la nota no es importante, sí lo es, porque no creo justo que unos que hicieron menos saquen mejor nota!”
-“¡Por llegar tarde tantas veces en el período no tienes excelente!
-“¡Por hablar demasiado en clase y por tu mal comportamiento, tienes insuficiente!
-“¡Hayque tener cuidado con esos estudiantes, protestan por todo, siempre se hacen las víctimas!”
--“¡No me hables, me caes mal!

Los anteriores actos de habla ilustran una cotidianidad cargada de opresión, negación del otro, de la diferencia y cultura del silencio, donde se aprecia una clara dificultad para la práctica de la libertad; entendiendo por ésta como la posibilidad que tiene cadaindividuo de realizarse individualmente, adquiriendo una conciencia crítica hacia el propio autodescubrimiento y la autoconquista, desde el ejercicio de la reflexión permanente, en torno al yo, al nosotros y al mundo, a partir del encuentro interpersonal e intrapersonal en medio de la diversidad.

Cabe entonces preguntarnos: ¿Cuál es el papel del docente y de la práctica pedagógico-didáctica ante lassituaciones de inclusión y exclusión?, ¿Qué concepción tengo del alumno(a)?, ¿Cómo docente que concepción tengo de la educación?.

-“¡Aquí en esta escuela, sí no te ajustas a las normas, mejor que busques otra institución!”
-“¡Me hace sentir como si yo fuera el peor alumno del colegio!”
-“¡Una educación que posibilite el libre actuar de los estudiantes, está centrada en el respeto a losmismos!”
-“¡Lo más importante del proceso educativo son los estudiantes!”
-“¡Yo me preocupo por ellos y los respeto, tengo en cuenta sus problemas!”
-“¡Mi práctica pedagógica parte del interés de los estudiantes!”

Al confrontar las preguntas con los actos de habla, se aprecia una incoherencia entre teoría y práctica, es decir, un divorcio entre lo que se profesa y lo que se hace, al privilegiar enel día a día, la domesticación del pensamiento de los estudiantes, la opresión a través de la intimidación, el miedo y la mutua confrontación, entre el maestro y el estudiante.
En consecuencia de lo anterior una educación para el ejercicio de la libertad desde la diversidad, requiere una escuela incluyente que ofrezca oportunidades de desarrollo individual y social a sus miembros, Rosa Wall (1993)señala que “La educación es la clave de la inclusión y la convivencia social. Pero garantizar de verdad la igualdad de oportunidades, las escuelas que tenemos deben transformarse hacia la apertura, el diálogo, la colaboración en red, la optimización del aprendizaje y la solidaridad”, se entiende entonces por inclusión como la oportunidad que tiene cada persona de autorealizarse sin distingo deraza, religión, condición social o credo político y en abierta diferencia con los otros; lo que exige del maestro asumir una actitud de alerta y de escucha para con sus estudiantes, en una relación entre iguales que supere las prácticas tradicionales centradas en la dominación del fuerte contra el débil y de la consideración de que el estudiante va a la escuela a ser educado, educación por supuestoque sólo puede brindar el maestro. La escuela inclusiva es un escenario donde los estudiantes y maestros tienen relaciones horizontales, las cuales se dan de buena manera y se apoyan en el respeto mutuo y en la pedagogía del buen trato. La escuela no debe ser una reproducción del conflicto social arraigado en falsas creencias en torno a la paz, debe ser un espacio que brinde protección,...