La Regenta

La Regenta- El Magistral Fermín de Pas y Álvaro Mesía.
En La Regenta, la protagonista oscila entre entregarse a la religión u obedecer a los impulsos de la carne y ceder al asedio de Álvaro Mesía. Por otro lado, se encuentran el Magistral Don Fermín y Mesía quienes se enfrentan en una lucha sin cuartel, en la que cada uno utilizan sus respectivas armas: la religión y la seducción,para obtener el alma de la mujer más virtuosa del pueblo.
El Magistral es un hombre ambicioso con unas ansias de poder infinitas. Al principio de la novela cuando se le ofrece la posibilidad de ser el nuevo confesor de Ana, acepta a su nueva penitente creyendo que al confesarla su prestigio en Vetusta aumentará debido a la tan conocida virtud de ésta. Al confesarla por primera vez cree encontrarun alma gemela con la cual compartir las dichas espirituales de la fe. Desde entonces pondrá todas sus energías en hacer de Ana su mayor victoria al introducirla de lleno en la religión. Sin embargo, a través de la novela los sentimientos del Magistral se van degradando y originan en él una pasión posesiva en la cual se siente dueño del alma de Ana hasta llegar al punto de descubrir que tambiénla desea como hombre. No obstante, el Magistral sabe que Ana no lo ve como hombre, sino como un “hermano espiritual”; consiguientemente, comprende que la única forma de tenerla a su lado es a través de exacerbar su religión y se enfoca en convertirla en beata. Quiere poseerla, ser su dueño, mandar en su alma, tener el poder y sabe que sólo lo puede lograr a través de la religión. Además, deseacontrolar su consciencia, ya que no puede poseerla como hombre. El Magistral se consume en una pasión que lo quema. Sabe que a pesar de desear que Ana lo vea como hombre esto no podrá ser y su única esperanza de satisfacer su pasión se encuentra en no saciarla plenamente porque comprende que en el momento que Ana descubra que la ama se horrorizará y se alejará de él. Al captar que Ana ya no lovenera como antes, para no perderla del todo decide no insistir sobre los asuntos religiosos. Además, sabe que tiene un rival, Mesía al cual no pretende otorgarle la victoria, pues sería una derrota además de quedar en ridículo ante todo el pueblo porque su obra más preciada se perdió.
Hacia el final de la novela, el deseo vehemente del magistral por poseerla y su orgullo herido causa queemerja el ser despiadado que existe en él. Al darse cuenta que ha perdido la batalla ante la seducción barata de Mesía, ya no piensa como hermano de confesión, sino como el marido que se consideraba. Se dice así mismo que él era el marido y no aquel idiota de Víctor. En las cartas desgarradas le dice: “Yo soy tu esposo…soy tu dueño…mandaba en tu alma…” (495-496).Tanto es su furia y convicción deque Ana le pertenece que al pasar por la fonda de Mesía, en sus cavilaciones se expone que puede matarlo y si le preguntan por qué lo mató respondería: “porque ha robado a mi mujer…” (494). Por lo tanto, se puede entrever como para el cura Ana es su posesión. Su pasión es tanta que cegado por los celos actúa como si fuera el marido ofendido, deshonrado. Lleno de ira no sólo planea la venganza encontra de Álvaro, sino que en su dolor de marido traicionado busca la caída de Ana. Por lo tanto al final, como el diablo que realmente es, quiere estrangularla, sin embargo, en vez de clavar sus uñas en ellas lo hace en su propio cuello y sale huyendo.
Por otro lado se encuentra el rival, Álvaro Mesía, quien es un materialista vanidoso de figura esbelta y elegante. Nunca ha amado aninguna mujer y sólo quiere conquistar a Ana para perpetuar su título de conquistador, ya que Ana es la mujer más bella y virtuosa de Vetusta. Al igual que su rival, en la conquista de Ana sólo ven su victoria. A diferencia del Magistral que usa la religión para controlar a Ana, Mesía utiliza todas las armas que encuentra a su paso. Como buen seductor examina a su presa y sabe que como buen...