La Reinvención Del Perú

LA REINVENCIÓN DEL PERÚ

Juan Abugattas


Un análisis franco de nuestra realidad que permita responder a la célebre pregunta del personaje de Conversación en la Catedral, ¿cuándo se jodió el Perú?, deberá llevarnos a la triste conclusión que nació jodido a la vida republicana. Concebido como una república excluyente, en manos casi siempre de unasélites dominadas por un espíritu depredador, poblado por gentes que más de una vez se han calificado certeramente de desconcertadas, el Perú no podía terminar sino donde está hoy: al borde de su inviabilidad como entidad política.

Pero un diagnóstico del Perú que no apunte a sacar a luz a su verdadera fisura estructural no permitirá tampoco imaginar un futuro superior. Y esa fractura básica esla inconsistencia moral de su sociedad, inconsistencia que se manifiesta de muchas maneras, por ejemplo, como una tolerancia extrema con el sufrimiento del otro, como una desconsideración total frente al interés público, como una insidiosa falta de solidaridad. No quiere esto decir de manera alguna que entre nosotros no hayan habido y no hayan hoy muchísimos peruanos que, individualmenteconsiderados, no sean dignísimos y muy buenos, hasta muy generosos. El problema está en cómo se ha ensamblado el orden social. La suma o mera yuxtaposición de santos no hace un paraíso. Como la mera yuxtaposición de malos no hace un infierno. Bien sabían los pensadores que fundaron la modernidad que las sociedades más sólidas y exitosas se pueden fabricar con vicios más que con virtudes. El problema, comose tiene dicho, está más en la goma que en aquello que debe pegarse.

Pues bien, ¿en qué consiste nuestro pecado original como peruanos?. ¿Por qué tenemos hoy la sensación fuerte que nuestra república, una de las más antiguas del planeta, ha fracasado? Pues, en verdad, qué otra cosa podría pensarse de un país que tras 170 años de historia mantiene a más del 60% de su población en condicionesprecarias de vida, y que no garantiza a sus niños niveles adecuados de nutrición y menos aún de seguridad, o que no produce prácticamente nada, contando con una tierra apta para producirlo todo, o que espanta a sus jóvenes y no les brinda esperanza de realizar sus sueños. La respuesta es simple: un país habitado por "vivos", por pícaros, es decir, por gentes de solidaridad restringida y menguada, nopodía ni podrá llegar a otro destino así transcurran mil años.

En el Perú jamás hemos tenido un proyecto en común, jamás ha habido un sueño verdaderamente compartido, porque ni siquiera hemos llegado al punto de estar seguros que todos queremos vivir juntos la misma aventura. Encerrado cada uno en su mundillo, en su corporación, en su familia, nos sentimos obligados a ser generosos y dulcesdentro del espacio de ese encierro y creemos, en eso consiste nuestra viveza, que todo vale con relación a quien no pertenece al mismo círculo, a la misma corporación, al mismo club.

Esta mentalidad se refleja con nitidez en todos los ámbitos de la vida. No me importa vivir en un palacio rodeado de miseria y de mugre, porque mi referente vital está limitado a mi espacio amurallado. No me importaapoderarme legalmente de las riquezas públicas, porque el juicio que realmente cuenta para mí es el de mi grupo o mi familia con quien sí seré generoso. No me importa convivir con la más abyecta ignorancia, porque en mi casa o en el colegio o en la universidad a que asisto tengo interlocutores que puedo considerar mis pares. No me importa depredar el territorio y sus recursos, porque en últimainstancia mi futuro y el de los míos no está necesariamente aquí.

En suma, para el vivo su propia felicidad es compatible con la infelicidad de la mayoría de sus conciudadanos o, mejor, supuestos conciudadanos. La exclusión y marginación de las mayorías en el Perú ha tenido este peculiar origen. Eso que en el Perú llamamos racismo tiene su secreto oculto en el alma del vivo. La causa real de la...