Le Goff Pensar la historia

Informe de lectura
Historia de la cultura I









La dupla“antiguo/moderno” está vinculada con la historia de Occidente. Del siglo V al XIX marca una oposición cultural. A mediados del siglo XIX se transforma con la aparición del concepto de “modernidad”. En la segunda mitad del siglo XX se generaliza en Occidente y se introduce especialmente en el Tercer Mundo gracias a la idea de “modernización” nacida al contacto con Occidente.
La oposición “antiguo/moderno”se desarrolló en un contexto complejo porque los “términos y los conceptos correspondientes no siempre se opusieron el uno al otro:. ‘antiguo’ pudo ser sustituido por ‘tradicional’ y ‘moderno’ por ‘reciente’ o ‘nuevo’” (Pag. 147, p. 2). Esos términos eran ambiguos porque según fuera la época en que se vivía, “reciente” o “nuevo” podía serlo para el momento en que se producía el estudio,pero después era considerado como algo pasado.
Cuando a partir del siglo XVI la historiografía dominante en Occidente dividió la historia en 3 épocas: antigua, medieval y moderna, cada objetivo se remite a un período cronológico y “moderno” se opone más a “medieval” que a “antiguo”. Stefan Swiezawski (polaco, historiador de la filosofía, 1907-2004) a propósito del esquema “vía antigua-víamoderna”, observa que este modelo no es utilizable por la historiografía doctrinal de esta época sin reservas y restricciones. Agrega que “ …el esquema no es general ni en el tiempo ni en el espacio, el concepto de progreso y vitalidad entonces vigente no siempre coincide con lo que en esa época se consideraba “nuevo”.
El problema principal de la dupla “antiguo-moderno” se refiere al término“moderno”. Lo que se pone en juego es la actitud de los individuos respecto de su pasado: en las sociedades tradicionales la antigüedad es un valor seguro, los ancianos dominan, es la gerontocracia. Pero, junto al respeto por la vejez había un desprecio por la decrepitud.
Pero es el término “moderno” el que genera la dupla y su juego dialéctico. La conciencia de la modernidad nace del sentido de rupturacon el pasado. El estudio de la dupla pasa por el análisis de un momento histórico que genera la idea de “modernidad” y al mismo tiempo crea para denigrarla o alejarla una “antigüedad”.
La apuesta conceptual que oculta la oposición “antiguo-moderno” es que “antiguo” designa un período, una civilización que no solo tiene el prestigio del pasado sino la aureola del Renacimiento, del que fueídolo e instrumento.
Pero mientras lo “antiguo” triunfa rápida y fácilmente sobre sus vecinos en el campo semántico de la antigüedad, lo “moderno” sigue por mucho tiempo asediado por sus rivales: la novedad y el progreso.
“Nuevo” implica un nacimiento, significa más que una ruptura con el pasado. Tiene el prestigio de lo apenas abierto, lo recién nacido, lo puro. Del mismo modo “moderno” seconfronta con lo que entra en el campo del progreso. Lo reciente opuesto al pasado. Pero cuando en el siglo XIX el sustantivo genera un verbo y un adjetivo – progresar, progresista - el término “moderno” resulta devaluado.
El Renacimiento establece una periodización esencial entre época antigua y época moderna. El entendimiento entre antiguo y moderno se hace a espaldas de la Edad Media.
Desdefinales del siglo XVI la superioridad de los verdaderos “antiguos”, los hombres de la antigüedad, era cuestionada. Desde el punto de vista de los partidarios de los antiguos, qué en los modernos solo ven decadencia, los partidarios de estos últimos o bien proclaman la igualdad entre las dos épocas o bien hacen beneficiarios a los modernos de la acumulación de conocimientos y experiencias...