Lisistrata

La Comedia LISÍSTRATA, de Aristófanes
-Selección de lecturas (escenas resumidas y adaptadas)
ACTO 1º, Episodio 1º
“Lisístrata, mujer ateniense, convoca en Atenas a Cleónica, Mirrina y otras
mujeres atenienses; y a Lampitó y otras espartanas”
-LISÍSTRATA.- ¿Cómo estás, Lampitó, amiga espartana?
¡Qué buen color, qué sana y robusta! Ahogarías a un toro…
-LAMPITÓ.- Sí, por Apolo: hago gimnasiaa diario y doy saltos
hasta patearme el trasero…
-CLEÓNICA.- ¡Qué carnes tan firmes y tersas!
-LAMPITÓ.- ¡Ay!, me soban como a una lechona en el matadero…
Pero decidme, ¿quién ha convocado esta reunión de mujeres?
-LISÍSTRATA.- Yo misma.
-LAMPITÓ.- Pues dinos de qué se trata.
-CLEÓNICA.- Sí, querida, explícanos qué te preocupa.
-LISÍSTRATA.- Ahora hablaré, pero antes quiero haceros
unapregunta muy sencilla.
-CLEÓNICA.- La que tú quieras.
-LISÍSTRATA.- ¿No echáis de menos a los padres de vuestros hijos,
que están en campaña? Pues yo sé bien que los maridos
de todas vosotras están fuera de casa.
-CLEÓNICA.- El mío, ay de mí, lleva fuera de casa cinco meses...
-MIRRINA.- Pues el mío, ocho meses completos...
-LAMPITÓ.- Y el mío, si alguna vez viene de su regimiento,enseguida agarra el escudo y se marcha volando.
-LISÍSTRATA.- Ni un poco de gustito nos queda ya... Entonces,
si encuentro el modo, ¿queréis ayudarme a terminar con la guerra?
-MIRRINA.- Yo sí, por todas las diosas, aunque desde hoy mismo
no pudiera volver a probar más el vino...
-CLEÓNICA.- Y yo: aunque tuviera que entregar la mitad de mí misma,
cortándome por el medio como un pescado.
-LAMPITÓ.-Y yo: aunque tuviera que ponerme a escalar las montañas
de Esparta, si desde allí voy a ver la paz.
-LISÍSTRATA.- Hablaré entonces;
no hay que ocultar el plan. Mujeres, si queremos
obligar a nuestros maridos a vivir en paz, tenemos
que evitar...
-CLEÓNICA.- ¿El qué?
-LISÍSTRATA.- ¿Lo haréis?
-CLEÓNICA.- Aunque nos cueste la vida.
-LISÍSTRATA.- Pues bien, hay que evitar acostarse con losmaridos.
(gestos y murmullos de espanto)
¿Por qué os volvéis? ¿Adónde vais? ¿Por qué ponéis esa cara
y negáis con la cabeza? ¿Por qué palidecéis? ¿A qué vienen
esas lágrimas? ¿Lo haréis o no? ¿Qué problema tenéis?
-MIRRINA.- No podría resistirlo; que siga la guerra.
-CLEÓNICA.- Yo tampoco; que siga la guerra.
-LISÍSTRATA.- ¿Eso dices ahora, merluza? ¿No dijiste antes
que estabas dispuesta adejarte cortar en dos mitades?
-CLEÓNICA.- Otra cosa, cualquier otra, hasta pasar por en medio
del fuego, antes que renunciar al placer del lecho, querida.
-LISÍSTRATA.- ¿Y tú? -MIRRINA.- Yo también por en medio del fuego.
-LISÍSTRATA.- ¡Cómo somos de ansiosas las mujeres! Con razón dice
Eurípides en sus tragedias, que sólo somos “un mar profundo
para entrar y salir los barcos…” Peroquerida espartana,

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tan solo con que tú estés de mi parte, podremos salvar el asunto,
di que sí…
-LAMPITÓ.- Difícil es dormir solas, por todas las diosas,
sin el marido al lado, pero si es por la paz, que tanta falta nos hace…
-LISÍSTRATA.- ¡Amiga espartana, tú sí eres como deben ser las mujeres!

ACTO 1º, Episodio 2º
“Lampitó, mujer de Esparta, firma un pacto con las ateniensesLisístrata y Cleónica”
-CLEÓNICA.- Pero si todas las mujeres -no lo permita Zeus-,
pudiéramos aguantar sin lo que dices ¿habría más paz por eso?
-LISÍSTRATA.- Mucha más; si nos pusiéramos a provocar a los maridos
dejándolos luego con ganas, olvidarían la guerra por nosotras, seguro.
-LAMPITÓ.- Como Menelao en la guerra de Troya, que cuando iba
a castigar a Helena por infiel, al verla desnuda tiró laespada, según dicen.
-CLEÓNICA.- ¿Y si nos llevan a la fuerza al dormitorio?
-LISÍSTRATA.- Nos agarramos a la puerta.
-CLEÓNICA.- ¿Y si nos obligan?
-LISÍSTRATA.- Nos dejamos de mala gana y procuremos que les duela;
en esto el hombre nunca goza si no va a la par con la mujer.
-CLEÓNICA.- Pues si os parece bien a las dos, probemos a ver si resulta.
-LAMPITÓ.- Nosotras allá en Esparta...