Los Gerentes Cometen Muchos Errores
que llegaban tarde al trabajo. Una empleada que había sido castigada —Janet Orlando
(ver foto superior)— se sintió tan humillada que renunciópoco después del episodio y posteriormente decidió demandar a Alarm One. En las conclusiones del juicio contra Alarm One, el abogado de la Sra. Orlando dijo que “ninguna mujer adulta razonablequerría que la colocaran ante un grupo de hombres jóvenes, la voltearan para que mostrara sus posaderas, lepropinaran nalgadas y la llamaran con nombres ofensivos, para luego argumentar que eso era con elfin de incrementar las ventas y motivar a los empleados”. No es de sorprender que un jurado constituido por seis hombres y seis mujeres fallara a favor de la Sra. Orlando, aprobara una indemnizaciónsuperior a la que pedía: $500,000, y como castigo fijara una multa de $1.2 millones. En primer lugar, ¿por qué hacía esto Alarm One? La compañía, con sede en Anaheim, California, defendía los castigosdiciendo que eran parte de un programa
voluntario para fomentar la camaradería, y que no era una discriminación porque los recibían tanto hombres como mujeres. Después del juicio, la Sra. Orlando y...
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