Los hijos de la malinche

Los hijos de la Malinche

Extrañamente, pensar en América, nuestra América, resulta ser una tarea mas compleja de lo que aparentemente se cree... Es decir, nuestro lugar en estas tierras nos posicionan sobre ella de tal forma, que se hace difícil contemplar nuestra extensión como seres, como hombres y mujeres o mujeres y hombres, como habitantes que fluyen a través del despliegue basto,expedito, sin baches ni obstáculos del tiempo, en toda la expresión del tiempo....
Por esta razón –y a propósito del texto de Octavio Paz- querer entender al habitante latinoamericano, seguir su huella, develar su pasado perdido y fúnebre, o intuir su futuro y potencialidades, así como entender la expresión misma de América, en tanto lugar, sitio, continente, en tanto tierra viva… Implicaponer los ojos no solo sobre el hombre o no solo sobre el continente, sino es preciso considerar ambos… es decir, hombre y continente se homologan, no es posible concebir uno sin el otro, participan de un rito indisociable, entrelazado, vivo, único…pasado pero también presente, lo que fuimos, lo que somos en este andar sobre América… o mas bien… lo que queda de ella, y de nosotros…A través del presente texto, Octavio Paz pretende o mas bien intenta descifrar e inferir a partir de signos, relatos, vestigios, huellas, testimonio y cicatrices que indeleblemente permanecen en el alma de Latinoamérica y por ende también en la nuestra - y siempre en retrospectiva- cuales fueron o han sido las manifestaciones históricas, culturales, sociales y económicas que por sigloshan ido modelando el ser latinoamericano, su ser en Latinoamérica.
Y de este indagar en los recónditos lugares del alma latinoamericana es que van surgiendo, brotando poco a poco, cual gotas de agua las respuestas que de alguna u otra forma articulan nuestra realidad actual, gotas de agua que en tanto respuestas poco a poco se tornan aguacero…
Este texto quiere en cierta forma exponer omas bien proponer cuales son los elementos que condicionan al mexicano desde su territorialidad… pero a decir verdad, las palabras de Octavio Paz, me suenan también a Chile, y por que no decirlo… seguramente a Perú, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Brasil etc. Como sea somos un mar de similitudes, esta condición de latinoamericanidad, trasciende nuestras fronteras, las derriba, ante esto somos todosuno. Y así como Octavio Paz da cuenta del “ser” mexicano…yo más bien lo entiendo desde el ser latinoamericano, aquel que cualquiera sea su ubicación geográfica dentro del continente, padece la misma condición: carga sobre su espalda el peso de la historia, esta historia viva que además es parte constituyente de su ser.
El mexicano (o el latinoamericano) es concebido por Octavio Paz como unindividuo arisco, parco, de bajo perfil, habituado a vivir en soledad, soledad que no acaece como mera circunstancia, sino que es un elemento fundante de su condición de ser, a partir de esta premisa, el individuo latinoamericano, a debido batirse en un mundo de silencios continuos, de mutismos locales, de cierre, de margen, de tercer mundo. Mutismo que viene a representar la condición históricade su ser, que en definitiva a devenido permanentemente en apariencia, en expresión sesgada de su realidad, en ocultamiento, en máscara. Máscara que esconde tras la sonrisa ficticia, el rostro desencajado del que reniega de si, aquel que huye de su condición natural por ignorancia o vergüenza.
Es sencillo extrapolar esta condición antes mencionada a nuestra propia realidad, es decir…lassociedades actuales, disuelven nuestra individualidad; diluyen sujeto en masa. En la dinámica del capitalismo todos los rostros están ocultos, hombres y mujeres tejen sus vidas, privados del bien mas preciado: su humanidad, se transmutan en objeto, material de cambio, instrumento funcional, donde todos somos masa inindividualizada. Mientras que dentro, en silencio, podemos, de vez en cuando y llenos...