los tres dialogos
FILONÚS.- De que no existe eso que losfilósofos llaman sustancia mate¬rial estoy firmemente persuadido; pero si se me hiciera ver que había algo absurdo o escéptico en eso, renunciaría a ello por la misma razón por la que yo creo que enla actualidad tengo que rechazar la opinión contraria.
HILAS.- ¡Cómo! ¿Puede haber algo más fantástico, más contrario al sen¬tido común, o una muestra mayor de escepticismo que creer que no existeeso que se llama materia?
FILONÚS.- Vayamos despacio, amigo Hilas. ¿Y si se demostrase que tú, que sostienes que existe tal materia, eres un escéptico mayor por tener esa opinión y eres más paradójicoy contrario al sentido común que yo, que creo que no hay tal cosa?
HILAS.- Antes me persuadirás de que la parte es mayor que el todo que, con el fin de evitar el absurdo y el escepticismo,obligarme a abandonar mi opinión en ese punto.
FILONÚS.- Así pues, ¿estás dispuesto a admitir como verdadera aquella opinión que, previo examen, se muestre mas de acuerdo con el sentido común y más alejadadel escepticismo?
HILAS.- De todo corazón. Puesto que te muestras partidario de suscitar discusiones acerca de las cosas más claras de la naturaleza, estoy dis¬puesto por una vez a oír lo quetengas que decir.
FILONÚS.- ¡Por favor, Hilas! ¿Qué entiendes por un escéptico?
HILAS.- Entiendo por escéptico lo que todos los hombres entienden, una persona que duda de todo.
FILONÚS.- De modo quela persona que no tenga ninguna duda acerca de algún punto particular no se la puede considerar escéptica.
HILAS.- Estoy de acuerdo contigo.
FILONÚS.- ¿En qué consiste la duda? ¿En afirmar o ennegar algo?
HILAS.- Ni en afirmar ni en negar; pues cualquiera que entienda el len¬guaje, no puede menos de saber que dudar significa una actitud sus¬pensa entre la afirmación y la negación.
112...
Regístrate para leer el documento completo.