Maestra

PRIMARIA “TERESA GUASCH”

















ANTOLOGÍA

¡CUENTOS DE MISTERIO Y TERROR!



Autores varios: Grupo de 6°



Querétaro Qro., 30 Noviembre del 2012

Página



INDICE

1.- Caso # 186 4

2.- Misterio en el parque6

3.- El orfanato 8

4.- ¿Quién lame tu mano? 11

5.- Una noche diferente12

6.- El extraño caso de Jason 14

7.- El principio del fin 15

8.- La fantasía de Juan 20

9.- El espíritu de Ana21

10.- La muerte de Vanessa 23

11.- Tercera llamada 25

12.- El espíritu de Panchito Cabret26

13.- La rosa negra 27



















1.- CASO # 186:

(Por: Hugo Lara Islas. 12 años)



-¡Feliz cumpleaños!

-¡Claro, otro día más!- dijo David con sueño.

Su madre muy emocionada le preparó un desayuno especial, lo cual a David le pareció elmismo desayuno de siempre, sólo que con un pastelito con nueve velas encendidas. Le pareció algo peligroso… se podía ocasionar un incendio, pero de todas formas no le importó.

Su madre le había preparado una fiesta en un parque de diversiones al que a David le encantaba ir en los domingos.

Después de apagar las velas, su madre le dijo que subiera a la camioneta. El encantado dando saltossubió y partieron.

Fueron recogiendo a cada uno de sus amigos. Al final, su madre le tenía una sorpresa…Su padre. Cuando David supo que su padre iría se alegró tanto que abrazó al primer amigo que vio. Su padre subió a la camioneta y saludó a David y todos contentos fueron a parar al parque, ese día fue inolvidable…

UN AÑO DESPUES…

Después de un año, David ya no era el mismo, desde que supadre desapareció, nada era igual ya.

-¡Feliz cumpleaños!- dijo su madre

David decepcionado, se levantó y bajó a desayunar. Al bajar percibió el mismo desayuno de hace un año.

Después de subir a la camioneta y haber pasado por todos sus amigos, David alcanzó a ver al final de una calle una silueta, una persona que, a David le pareció familiar.

Llegando al parque, le pareció haber vistola misma persona que había visto en esa calle, la persona lo miraba.

Giró a ver a sus amigos que tanto le insistían de que fueran a los coches chocones, el aceptó.

Tras haber jugado ahí por tres veces seguidas, David volvió a ver a la persona y desde ese momento, un escalofrió le recorrió el cuerpo entero y empezó a espantarse.

Después, sus amigos y él se dirigieron a la montaña rusa.Subiendo, se pusieron el cinturón.

Dieron vueltas y vueltas, giros y giros hasta subir por una pendiente que parecía caer con mucha más intensidad.

Terminó la ronda y a unos pocos metros del túnel que los conducía a la salida se detuvieron, se quitaron el cinturón y bajaron.

Su madre los esperaba al otro lado del túnel. A mitad de éste, una silueta observaba a uno de sus amigos con...