Mago

Nivaldo Machin
Ap Literatura y Cultura Iberoamericana
Melissa Scholem
Bloque 6
Jueves 21 de febrero del 2013
Mago

Las manos te sudan, puedes sentir como cada gota nace desde el centro de tu palma, nada hacia los espacios entre tus dedos y se transporta hacia las orejas aterciopeladas del animal. La luz amarillenta ciega a tus dos pupilas ansiosas pero sabes que miran, que esperan, queexigen. Saboreas el momento, por que sabes que en estos segundos robados eres mas grande que la vida misma y que independiente de tu condición, de tu estrato y tu enfermedad por este momento reinas al mundo. Entonces con un movimiento exagerado sacas al pequeño Napoleón con cuerpo de nieve, ojos rojo ensangrentado y diminuto corazón aterrado del sombrero. El publico no reacciona instantáneamente.El corazón se te para por una vida entera pero cuando la luz amarillenta se torna anaranjada bronce, se ilumina el teatro y el publico estalla en aplausos tan entusiasmados que escuchas como chocan los anillos masivos dorados de las damas de la corte cuando aplauden. Se infla tu pecho con orgullo y te acercas hacia el borde de la tarima ocre donde paras y con un movimiento delicado te doblas haciadelante, bajas tu cabeza, esperas unos segundos, la vuelves a levantar y con una sonrisa triunfante te despides. Cruzas el escenario hasta que llegas a la puerta, un rectángulo de madera de roble adornado con flores de un café tan claro que se parece a la miel y entras. Dentro del camerino te lavas las manos y a pesar de que intentas resistirte lo repites y te las lavas de nuevo usando el jabónpúrpura dos veces. Te secas dos veces las manos mientras sientes como tu cuerpo ya no te pertenece cuando empiezas a marearte. Ya no estas nervioso pero sigues sudando, incluso en el frío del camerino sientes como el collar de tu blusa color índigo empieza a humedecerse. Frustrado sueltas tus brazos y en movimiento violento escuchas caer la copa de vino y el liquido se diluye en tu alfombra de talforma que se forma una mancha marrón . Es entonces empiezan a burlarse de ti las figuras de los cuadros, escuchas como el ángel de mejillas rosas te llama el pequeño bufón de Viena, y a pesar tu les respondes que eres el Gran Mago de la Corte se te ríe y lo que empieza como una dulce risa juvenil se transforma en un chillido siniestro que te atraviesa los tímpanos y te paraliza el cuerpo. Laspupilas del ángel se tornan carmín y la lengua que de pronto se alarga, como la de una cobra. Empiezas a gritar al comienzo son gritos de rabia pero mientras mas se te ríe el ángel mas desesperados se vuelven tus lamentos. Le ruegas al ángel que te deje en paz pero tu pedido solo logra entusiasmarlo mas y sus risas se vuelven mas escandalosas, es entonces cuando tus piernas ceden y caes al piso, tucubres las orejas y empiezas a llorar desmesuradamente. No escuchas la puerta abrirse pero de pronto ves entrar a tu asistente Baltazar, quien carga a Napoleón entre sus brazos, con sus pequeños ojos verde oliva hundidos en preocupación y su boca en una mueca resignada. Baltazar deja al pequeño conejo en una jaula de metal azulado, toma un frasco del cajón izquierdo, sirve agua en una copa y seacerca a ti. Te seca las lagrimas y te abraza, tratas de explicarle que el ángel ha vuelto, que te sigue torturando, pero Baltazar se sienta a lado tuyo, estira su brazo sobre tu hombro y te abraza. Cuando te calmas lo suficiente para respirar tranquilamente, Baltazar dulcemente te asegura que eres el mayor mago de Viena pero que sufres de esquizofrenia y que el ángel no es nada mas que un delirio,la consecuencia de no haber tomado tu antipsicóticos. Te entrega dos pequeñas tabletas color lila y la copa de agua y te instruye que te las tragues. Reconoces la familiar sensación de la tableta arrastrándose a través de tu garganta y entonces exhausto te acuestas sobre las piernas de Baltazar. Tus ojos pesados empiezan a cerrarse y lo ultimo que recuerdas es el rojo escarlata del mantel de la...