manuela y maria


Manuela: la novela de la nación que no existió. La novela nacional colombiana.
JAMES RODRÍGUEZ
María (1867) fue, hasta hace muy poco, el gran referente de la Literatura Colombiana1: el aparato educativo mostraba a la creación de Jorge Isaacs como la representación más fiel de la cultura y la historia colombiana del siglo XIX y, por ende, de la formación de la nación. Era sintomático de estaveneración al genio del escritor vallecaucano (al menos en las instituciones educativas del Valle del Cauca) las excursiones que en los primeros años de escuela se realizaban a la hacienda El Paraíso en una especie de peregrinación que se asemejaba a las dinámicas de visita a los santuarios católicos: en el recorrido de la hacienda-museo se nos mostraba cómo era la vida en el siglo XIX enColombia, con el tono doctrinal de una eucaristía. Nuestra “novela nacional”2 se exhibía a los niños en una confusión entre realidad y ficción mientras las otras naciones posibles, representadas por otras posibles novelas nacionales se quedaban en las sombras.
Habría que estar de acuerdo con Doris Sommer al calificar este hecho como algo sorprendente y perverso dado que no era María una novelacomprometida como otra literatura producida en Colombia y en el resto de Latinoamérica en esa época. La misma autora señala a Manuela (1858), de Eugenio Díaz Castro, como un ejemplo de contraste. Su aparición por entregas en la publicación del grupo literario Mosaico fue patrocinada por Manuel Vergara y Vergara como la novela nacional3. Sin embargo, la historia le daría ese lugar al Romance de loshacendados Efraín y María y olvidaría, o al menos desdeñaría, el retrato costumbrista de la descalza Manuela y su lucha social y política. No es común ver currículos de educación media que hayan incluido a Manuela dentro de sus programas; no se encuentra, además, un solo monumento público importante de Eugenio Díaz Castro, por el contrario los de Jorge Isaacs proliferan, sobre todo en la ciudad de Cali ysus alrededores.
Mi intención con este texto es, por lo tanto, buscar algunas de las posibles razones por las que la postulación de Manuela como novela nacional no encontraron eco en la formación de la comunidad imaginada colombiana (sobre todo en la historiografía más oficial). Por otro lado, como este proyecto no puede ignorar la consolidación de María como novela nacional, me propongoencontrar posibles respuestas, o al menos plantear hipótesis, que (me)expliquen este evento ocurrido en la cultura colombiana. Para ello analizaré brevemente el contexto político de la época, que nos muestra las correspondencias entre los procesos políticos que generaron la primera constitución colombiana y la consolidación de la novela nacional. Propondré además un ejercicio de contraste con el casoecuatoriano que me permita dimensionar lo particular de este evento en la historia literaria colombiana.
En primer lugar habría que atender a lo que, siguiendo a Doris Sommer, es sorprendente y perverso en el hecho de que María haya sido consolidada como la novela nacional colombiana. Si contrastamos con el caso ecuatoriano, encontramos de entrada, una serie de diferencias que (al menos para mí) sonbastante sorprendentes. Refiriéndose a la relación entre las novelas de los siglos XIX y XX, Fernando Balseca afirma que: “la literatura no es sólo un producto del entorno social, sino que es un discurso que ha ayudado a construir realidades sociales”4. Resalta la mirada de los escritores hacia lugares desconocidos de la geografía nacional en ese entonces. Lo que representaría una necesidad dereconocimiento que, a pesar de tener como uno de sus componentes la búsqueda civilizadora propia del imaginario de nación y de los discursos de poder del siglo XIX5, es, ante todo, un proyecto de encuentros propiciado por las novelas nacionales (Cumandá, Juyungo, La Emancipada…). Más adelante, el autor afirma: “Esta lectura puede llevar a la comprobación de un proceso en el que el discurso...