Melodia De Los Desaparecidos

Melodía de los desaparecidos

Todos dijeron que habíamos muerto, ¡Pero no!
Después de tanto tiempo de estar vagando por cientos de calles de Alemania encontramos un maravilloso lugar dondeestablecernos .Era un lugar lleno de gordos y satisfechos habitantes, graneros repletos y despensas provistas.
En este gran lugar después de soportar tanta hambre y andar de cuidad en cuidad sin tenercomida suficiente, nos permitimos disfrutar de los manjares que nos brindaba cada oportunidad.
Iniciamos con los graneros y trigales, comimos todo tipo de frutas que veíamos, entramos en las casas,comimos del mejor pan de toda la cuidad, quesos, frituras y todos los postres, definitivamente era el lugar más cálido que habíamos recorrido...
La población no se veía muy cómoda con nuestra presencia,al parecer no les gustaba compartir su comida, era gente llena de avaricia.
Mientras nosotros nos paseábamos por todo el pueblo, de la iglesia a la carpintería, cada vez que nos veían no podían evitarrepudiarnos. No se puede negar que somos una familia bastante numerosa, donde nos veían nos hacían ir, nos ahuyentaban, algunos de ellos nos agredían físicamente.
En estas peleas cayeron muchos denuestros parientes y amigos, murieron en cocinas, en alacenas, en parques, bajo las camas, en techos y todos pararon en la basura, pero no nos dejamos, cada vez uno más de nosotros salían a las calles,por entre más que mataran, más habían.
Un día llego un flautista y se ofreció a sacarnos del pueblo tocando su instrumento por cien monedas de oro, en la noche después de hablar con los habitantestuvo una reunión con nosotros y nos prometió 50 de sus monedas si los seguíamos como hacemos en cada pueblo que visitamos.

Aceptamos y a la mañana siguiente fuimos detrás de su “dulce melodía”camino a la siguiente población.
Cuando el flautista se devolvió a hamelin no le dieron el dinero que estaba ya pactado y por ende nosotros también nos quedamos sin las 50 monedas, sin saber qué...