Mill

John Stuart Mill

Los cambios sociales, el crecimiento de la pobreza, la fragmentación social, las desigualdades han cuestionado fuertemente dos mandatoshistóricos de la escuela Primaria: la homogeneización cultural y la cohesión social. Aunque en los discursos se da lugar a diversidad, muchas escuelas no logran funcionar como productoras deintegración social y garantizar ciertos saberes comunes.
Frente a distintos circuitos de exclusión y estigmatización, intolerancia, en una trama de ruptura del lazo social, la escuela debe tener una nueva miradahacia los alumnos, sus familias y el contexto. Esta diversidad, que ingresa a la escuela, ya sea desde el alumnado o desde los docentes, desafía a las instituciones y les requiere revisar y repensarla pedagogía normalista que aún se desarrolla, en algunas escuelas, como herencia de un pasado que marco el Nivel Primario.
Muchas veces se cuestiona la inclusión de aquellos que no responden alideario normalista que se espera, no entendiendo a la diversidad como constitutiva del ser humano. Esta, considerables veces, viene marcada por necesidades derivadas de distintas situaciones de desventajasocial, económica, sexual, o por pertenecer a minorías culturales o religiosas. Todos somos diferentes y esa diferencia es la que nos hace únicos, enriquece el intercambio, la formación y lastrayectorias educativas. Mill. consideraba que las diferencias de costumbres, experiencias y opiniones son positivas para el desarrollo de la humanidad y que la sociedad limita en exceso la individualidad.Lograr revisar las representaciones que producen las desigualdades educativas, sociales y generan la exclusión, es esencial para poder empoderar a los excluidos y dotarlos de las herramientas que leposibiliten el desarrollo pleno de sus capacidades y el logro de trayectorias educativas exitosas.
La escuela se ve desafiada desde su mirada tradicional, basada en algunos pilares pedagógicos del...