Muerte

Creo que debo de darle toda la razón a Savater en este capítulo. Él dice que descubrió el reflexionar, el pensar el solo sin que nadie le obligara a memorizar, o a aprender que es la muerte, cuandoun día (una noche para ser más exactos), en su cama, se dio cuenta que iba a morir. Es como si leyera mi propia historia: descubrí que iba a morir un día, por la noche, en la soledad de mi cama. Meacuerdo que era invierno, porque estaba tapado con una manta gruesa, azul. Y se pronto, sin saber porque me puse a pensar. Y, también sin saber porque, me encontré de cara a la muerte y me di cuenta dealgo de que iba a morir irremediablemente. Lo que más me aterrorizaba realmente de ella era, como dice Savater el no ser, la negación a la vida: el no poder pensar, moverme, escuchar, no ver, nosentir, no respirar. Y en ese sentido se me bloqueo el cuerpo, y empecé a sentir miedo de verdad. No miedo por ver una araña y que me diera asco. Fue miedo al propio miedo. Solo podía pensar en la muerteen sí. Intente desviar mis pensamientos, hacia otra cosa, o incluso no pensar. Pero no fui capaz. Intente consolarme pensando en un posible cielo (o incluso infierno). Pero sin saber porque, eso no meconsoló mucho tiempo. Y pensé que si hubiera un cielo, los humanos lo sentiríamos. Lo intuiríamos (en realidad eso lo pensé tiempo después). Me pase toda la noche hasta que recuerdo llorandoimaginando como sería no ser, durante un momento. Y justo cuando lo pensaba, se me bloqueaba el cuerpo y no podía mover nada. Durante varias noches seguí pensando en la muerte y su negación en la vida, hastaque conseguí enterrarlo en algún lugar de mí mismo. Desde esa misma semana, nunca más he recordado haber soñado algo. No es algo que hecho mucho de menos. Por aquel entonces no soñaba mucho (Una vezcada mes) y siempre la misma pesadilla, que sigo sin descifrar, y que me acuerdo que dolía. También me acuerdo, que me despertaba furioso, y me inventaba un final alternativo para esa pesadilla, y...