Novela

El día 11 de noviembre de 1997, una joven llamada Verónica decidió matarse; pero antes de ejecutar su decisión realizo sus deberes como de costumbre. Cabe mencionar que ella vivía sola en un cuartoque rentaba a las monjas en el convento.
Ella había decidido matarse con pastillas para dormir y antes de irse a dormir colocó cuatro cajas de esas pastillas en la mesa de dormir.
Verónica ha tomadola decisión de tomarse las pastillas una por una, ya que existe una gran diferencia entre la intención y el acto y en caso de que en la mitad del camino decidiera arrepentirse le fuera más fácildetenerse.
Verónica no sabía exactamente en qué lapso de tiempo perdería la conciencia, así que decidió llevarse una revista francesa a la cama, la cual era un numero reciente que había llegado a labiblioteca donde ella trabajaba.
Al empezar a leer la revista que había tomado, encontró en un artículo de informática que el periodista de este articulo espesaba sus escrito preguntando “¿Dónde estáEslovenia?” y ella pensó “Nadie sabe dónde está Eslovenia, ¡ni falta que hacia!”. Pero Eslovenia existía y estaba ahí delante de los ojos de Verónica, ya que Eslovenia era su país.
Verónica indignadadejó a un lado la revista y empezó a recordar que tan difícil fue conseguir las pastillas para dormir, pues esta era la manera que ella había elegido para morir. Antes había analizado ya otras opcionescomo cortarse las venas, pero esta idea era demasiado sangrienta; otra opción era arrojarse de alguno de los edificios de Ljubljana, pero pensó en el sufrimiento extra que les acusaría a sus padres yaque después de saber que su hija había muerto por que se arrojó desde un edificio, la idea de tener que reconocer el cuerpo era escalofriante; era más fácil hacerse a la idea de una hija muerta atener que vivir con el recuerdo de un cráneo roto.
Cuando Verónica consiguió las pastillas decidió dejarlas durante una semana sobre la mesita de noche, y así poco a poco fue enamorando a la muerte...