Nuevas formas de leer

Actualmente las formas de leer se han multiplicado, al igual que el tiempo que pasamos leyendo. Los cambios han sido vertiginosos y han provocado nuevos hábitos en nuestras formas de leer einformarnos.
Partamos de una simple comparación: cambiamos el hecho de dar vuelta una página con un dedo a hacerlo por medio de un mouse para luego, con los nuevos dispositivos electrónicos volver al uso deun dedo para “pasar de pantalla”. Las generaciones que no nacieron con un ordenador al alcance de la mano se ven obligadas por la vorágine de los adelantos a aprender el uso de los mismos y explorarloscomo cuando eran niños y comenzaron a utilizar sus primeros libros; en cambio las generaciones actuales pareciera que al momento de nacer ya tiene adquiridas las nociones básicas del uso de unordenador.
Es cierto sí, que las nuevas tecnologías afectan nuestra vida cotidiana, en muchos casos facilitándola y transformándonos en sujetos de consumo, en otros obligándonos a aprender cómo usarlos oquedar fuera del avance tecnológico.
La presencia cada vez más común de nuevas tecnologías en el medio social en general, en la escuela en particular y en los hogares promueve nuevas formas deconsumo textual, se lee más o igual, pero no de la misma manera.
Los formatos hipertextuales abren un sinfín de caminos hacia la obtención de información. Lo que antes nos llevaba mucho tiempo y cantidadde libros que explorar, ahora lo hacemos más rápidamente y me atrevo a decir que se llega a consultar mucha más bibliografía sin movernos de nuestra silla y a su vez exige un análisis más detalladode lo que se lee.
Los soportes textuales han cambiado a través de los siglos, tablillas, papiros, códices, la imprenta, el libro propiamente dicho, el ordenador, la Tablet, el E-book, todos ellosútiles en su tiempo, pero siempre prevaleció el mejor, el más cómodo, por ahora el que más ha conformado a la humanidad por su simplicidad, “El Libro”, objeto que pienso será muy difícil de sustituir...