Obabaoak

OBABAKOAK
BERNARDO ATXAGA

El autor, Bernardo Atxaga, nos invita a hacer un recorrido, un viaje a través de veintiocho historias y una pequeña autobiografía, que consiguen mantener la atención, el interés del lector en todo momento.
Los números van a ser elementos imprescindibles en la narración, elementos repletos de sensibilidad que el autor utiliza para aproximarnos al detalle, paraotorgar una veracidad poética a todo lo que nos quiere contar.
Así, leemos, haciendo referencia al otoño: “… En cuanto a las golondrinas, ya estaban alineadas en los cables de corriente eléctrica: ciento veinte golondrinas en un cable y ciento cuarenta en el otro…” (Pag. 73).
Lo mismo ocurre con los peldaños que conducen a la escuela, el autor nos acerca a la imagen, a la visualización, consigue quevivamos esos “veintitrés escalones” que suben la maestra y los niños, con un sentido propio, con un significado (pag. 71).
Y los números, tienen también su relevancia en ese juego de la oca, metáfora de la vida, en esas viñetas numeradas que despiertan ilusiones o temores, que nos permiten avanzar o detenernos, ir conquistando casillas y conseguir que estén al alcance de la vida, del escritor.Una característica del libro es que el autor escribe y transcribe, invita al lector a imaginar.
La transcripción de textos escritos por el canónigo Lizardi que no se pueden transcribir íntegramente porque aparecen páginas enmohecidas y “solo se salvan un par de líneas” (pag. 57). Expresiones como “parece lícito suponer” (pag. 52), nos sumergen en un mundo de intriga, de sorpresa, que el autor tejecon una maestría literaria admirable.
El tiempo es otro elemento importante que contextualiza todas las historias, un tiempo subjetivo que salta caprichosamente, que se mide en un reloj de arena, granos de vivencias y emociones.
Podemos leer: “¿Qué era el dieciocho de noviembre? Un día… pero aquello sólo debía de cumplirse en otros lugares, no en el barrio de Albania.” (pag. 77).
Los recursosliterarios como la personificación, la metáfora, están presentes y son la estructura fundamental del texto. Así vemos como el anciano Matías (pag. 63) atribuye y asocia una serie de actos de un jabalí a un comportamiento humano. El jabalí, realmente, es el niño, la sensibilidad del niño. Este texto cuestiona también el lugar y el significado de la paternidad (la paternidad, ¿quizás de Lizardi?).Esta es una de las muchas preguntas que quedan abiertas.
Los personajes que el autor nos va presentando, van convirtiéndose a medida que avanza la palabra, que avanzamos en las mágicas casillas, en seres humanos que nos emocionan, que nos van resultando entrañables por lo que tienen cada uno de ellos de particular, de propio, por su autenticidad.
De esta manera, la maestra de Albania con susincera y tierna manera de expresarse en su carta al inspector (pag. 74), con su rasgo particular de conocer y nombrar mariposas, con su actitud de superación, con su vitalidad, como pasa de ser mujer de “CORAZÓN CONFUSO” a mujer de “CORAZÓN ASUSTADO”.
Manuel, un chico de doce años y su perro Moro, un diálogo caracterizado por la agilidad y la teatralidad.
Katharina, otro personaje, nos dibuja elsentimiento de la soledad, nos emociona cuando dice “Pero es que, además, da un poco de vergüenza andar paseando sola…”. “… Si tuviera un perro le llamaría Clark” (pag. 109), expresa ternura, afectividad, deseo.
Marie, una niña de once años que nos descubre su visión de la vida, la relación con su abuelo que le transmite un “saber” único acerca de la naturaleza y los pájaros con una gran bellezapoética: “… Arthur era un tardón, se entretenía en los campos y luego siempre andaba a última hora corriendo para que la noche no le cogiera fuera del árbol…” (pag. 117).
Las relaciones de amistad están presentes y valoradas en los cuentos, las historias, los encuentros y desencuentros entre personas. Así Julián dice: “usted sólo ve lo que hay y yo veo lo que hay y lo que no hay”. Esta frase es...