ojnoijnhoiu

Páginas: 6 (1287 palabras) Publicado: 6 de agosto de 2013
El gran califa Harún-al Raschid y su gran visir Giafar salieron disfrazados con el propósito de observar la manera de comportarse de los guardias en la capital y sus alrededores.
A la entrada del puente, se encontraron a un ciego de bastante edad, que pedía limosna. El califa se volvió y le puso una moneda de oro en la mano. El ciego entonces le retuvo la mano y le dijo:
- Generoso donado, nome neguéis el favor q te voy a pedir dadme una bofetada, la tengo bien merecida y hasta merezco un castigo mayor.
El califa, a quien semejante demanda había dejado muy sorprendido, tratando de deshacerse del anciano, le dijo:
- Buen hombre, no puedo hacer lo que me pides: Dios me libre de borrar el mérito de mi limosna maltratando burdamente al que la ha recibido.
- Señor – replicó el ciego –dame, te lo ruego una bofetada, o recoge tu limosna, porque solo con esta condición puedo aceptarla; lo he jurado solemnemente ante Dios y si conocieras la razón de por qué lo hice, estarías de acuerdo conmigo en que el castigo es demasiado liviano.
El califa, que no quería entretenerse por más tiempo le dio una ligera bofetada. El ciego le soltó al instante le dio gracias y lo bendijo.
Sinembargo, el califa quiso conocer el motivo que obligaba a aquel ciego a comportarse así y le pidió que se presentase en el palacio al día siguiente para que le diera una explicación.
Al otro día, el califa lo recibió y le pregunto como se llamaba. – Me llamo Babá-Abdalá – respondió el ciego.
- Babá-Abdalá, tu manera de pedir limosna ayer me pareció tan extraña, deseo saber por qué motivos hiciste unjuramento tan indiscreto. ¿Cómo se te a ocurrido esta idea extravagante?
Así dijo el ciego: - Has de saber que nací en Bagdad. Cuando murieron mis padres, yo me ingenié para aumentar los bienes que me habían dejado. Acabe siendo lo suficientemente rico como par tener ochenta camellos, que me valían crecido beneficios, púes los alquilaba a las caravanas que iban de un país a otro.
Un día,regresaba de Basora con mis camellos vacios y había hecho un alto en un lugar muy alejado de toda población, entonces se acercó a mi un derviche que iba a Basora y se sentó a mi lado a descansar.
Mientras comíamos, me dijo saber que en cierto lugar, no lejos de donde nos hallábamos, había un tesoro con tantas riquezas, que después de cargar mis ochentas camellos de oro y piedras preciosas, no pareceríasiquiera que lo hubiesen tocado. Esta buena noticia me sorprendió y encantó de tal manera, que exclame:
- ¿De qué te sirve conocer dónde se esconde ese tesoro?, tú solo no podrás llevarte gran cosa. Vayamos juntos; yo cargaré mis ochentas camellos y te regalaré uno.
- Hermano – me dijo tranquilamente – tú mismo puedes ver que lo que me ofreces no guarda proporción con el bien q yo te voy ahacer. Estoy dispuesto a conducirte al lugar del tesoro, cargaremos tus camellos con oro y piedras preciosas, con la condición de que cedas la mitad, después de lo cual nos separaremos. 
La condición era muy razonable, de modo q al cabo de un rato llegamos a un valle lleno de piedras, rodeado de altas rocas que parecían atravesar el cielo con sus azuladas cimas.
Se alejó y lo vi encender una hoguera,echar un poco de incienso mientras pronunciaba algunas palabras misteriosas, y al punto se hizo en la roca una gran abertura.
Infinitas riquezas en oro y piedras preciosas brillaban en medio de una sombra mágica, me abalance sobre el primer montón de oro q tenía adelante y empecé a recogerlo.
El derviche hizo otro tanto, noté que prefería las piedras preciosas al oro. Ya cargados mis ochentacamellos, el derviche, antes de cerrar la montaña, sacó una pequeña cajita.
Pronunció unas palabras y la montaña se cerró, nos repartimos los ochenta camellos y valiéndome de las palabras más expresivas le agradecí la fineza que me había hecho, nos abrazamos con sumo alborozo y cada cual tomó su camino.
No había dado cien pasos cuando el demonio se apoderó de mi corazón, Corrí detrás del...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS