Olividándose Y Extendiéndose

OLIVIDÁNDOSE Y EXTENDIÉNDOSE
Lic. Julio Ruiz
El comienzo de un nuevo año es una referencia obligada para saturar nuestras mentes con los más encumbrados pensamientos, pero sobre todo con las másplausibles y mensuradas metas. Es la ocasión, después de haber “enrollado y soltado el año viejo”, para extenderse a lo que está delante. No es el tiempo para poner la mano en el arado y mirar atrás.Tampoco será el tiempo para conformarse con las glorias del pasado o detenerse por los fracasos que marcaron nuestras vidas. Se dice  que el que vive siempre a la sombra del pasado, está propenso aderrotar el proceso de desarrollo de su futuro. Los fracasos y los triunfos de ayer podrían tener la misión de vedar las oportunidades que le aguardan a la vida en el porvenir. Necesitamos, pues, pasarde un tiempo al otro. Una nueva agenda se abre con sus trescientos sesenta y cinco días y los doce meses del año. Sobre ella hemos de plasmar, no solo fechas para recordar, eventos a realizar,viajes que hacer, estudios que terminar... sino promesas para cumplir, actitudes que abandonar; y sobre todo, relaciones para mejorar.

Los dos verbos que forman parte de nuestra entrega de hoy laformuló un hombre que descubrió el sumo bien de la vida. Aquel que aunque siendo poseedor de una rica herencia religiosa e intelectual no las consideró cómo exclusivas para vivir, sino que el sustento desu vida, fuera esta en lo material o en lo espiritual, estaba basado en su más grande máxima: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Pablo dijo esto no porque fuera un fracasado que al final decada año tuviera más quejas y lamentos, que razones para celebrar. Más bien las dijo para animarnos en la indetenible carrera del tiempo, que va surcando sus huellas sobre la vida, y al final de cadaaño se convierte en el gran juez que dará su veredicto sobre nuestras acciones. De esta manera se expresó: “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando...