pabellón de niños quemados

PABELLÓN DE NIÑOS QUEMADOS

Marcas en la piel: Vestigios del descuido

Una mañana fría en la que las horas se hacen más largas, los rayos del sol abren las puertas de un pabellón en donde se lucha por la vida. Las paredes de este lugar albergan historias de errores y dolor… Niños que sin saberlo se enfrentan a duras batallas de recuperación y malestar. Las marcas en la piel que nodesaparecerán en los pequeños cuerpos de muchos angelitos serán la muestra de l tratamiento que se realiza en el pabellón de niños quemados.

Cuatro cuartos de 3x2, con cuatro camillas cada uno, se dividen por la gravedad de casos que llegan casi todos los días al Hospital Viedma, un pasillo que a medida que se lo va recorriendo muestran las heridas en los pequeños cuerpos, condiciones precarias paradoctores que tratan a niños de quemaduras muy graves y de gran magnitud, es el escenario de los más de 1194 casos de niños que vuelven a este hospital su hogar por muchos meses.

Historias que nacen de descuidos son las vidas de estos niños que aún sin haber vivido se enfrentan a una lucha constante por su vida, como Esmeralda Ticona, una niña de dos años y medio, recientemente internada, hijaúnica de un joven matrimonio que vive en la zona periurbana de la ciudad.

El padre estaba a un lado de la casa arreglando la puerta del cuarto de la bebé cuando oyó los chillidos de la niña y la voz alterada de la madre entre los mismos. Al ir corriendo hacia el lugar, entró en su cocina y antes de poder decir algo, el padre pudo contemplar la escena. La olla volcada en el suelo, la llamaazul del fogón y el charco del agua sobre el piso con el agua todavía humeando. La bebé se encontraba de pie y rígida mientras le salía el vapor del pelo, pecho y brazos, su cuerpo de color rojo intenso, los ojos en blanco y la boca abierta, La madre desesperada corrió al auxilio de la niña y trataba de secarla inútilmente, el padre la agoró de las axilas, la levantó del charco humeante y la llevoal lavaplatos en donde abrió la pila y dejo que el agua corriera. Inmediatamente los dos padres gritaron por auxilio y los vecinos los ayudaron, tal y como estaba llevaron a la niña al camión de su vecino el cual los llevó a emergencias del Hospital Viedma, ahí trataron la piel pero la llevaron inmediatamente al pabellón.

Los resultados serían terribles, el 50% del cuerpo de Esmeralda teníaquemaduras de tercer y segundo grado en toda la parte delantera de su pequeño cuerpo. La operación de injertos de su misma piel se realizó a la mañana siguiente, Esmeralda se encontraba en uno de los cuartos en donde descansaba, acostada sin cabello, con la piel expuesta y las extremidades atadas a la cama para que no se tocara su piel, que según el doctor, sentiría una picazón e hinchazón conmucho dolor.

La realidad azota cuando llega la hora de su tratamiento diario, la hora de sacar las vendas que tiene en los sectores más graves, y limpiar los sectores quemados con un líquido que le provoca mucho dolor. Los gritos de Esmeralda avasallan el lugar, “mami!” chillidos de dolor que se agudizan al llegar al sector del pecho y los brazos, lugar en donde las quemaduras son más profundas.La enfermera encargada le agarra la mano, le acaricia la cabeza y trata de tranquilizarla hablándole con una suave voz, diciéndole “Tranquila, todo estará bien” trata de calmar los gritos mientras Esmeralda desconsolaba sigue pidiendo por su madre.

A esta pequeña niña le quedan muchos meses de recuperación dentro del hospital y cuantiosos años de lucha en la fisioterapia, tratamiento que debenseguir los niños quemados para poder movilizar todos los sectores que tienen con nueva piel.

La enfermera cuenta la historia de Esmeralda como la de muchos niños que llegaron a ese lugar por descuidos de sus padres, que llegan arrepentidos y sin consuelo a emergencias del hospital Viedma, estas trágicas escenas en donde las víctimas fatales, en su mayoría, no pasan de los cinco años. El...