Política Española

¿CRISIS DE LA DEMOCRACÍA?

Abordar la cuestión de la legitimidad de la democracia no es baladí, ya que nos encontramos ante un concepto que presenta dificultades definitorias. Algunos autores la consideran una expresión poco rigurosa y poco apropiada para las condiciones de la investigación empírica (Montero, 1992). Pero lo cierto es que la legitimidad es considerada como un componentefundamental para el buen funcionamiento de la democracia. Morlino (1980) lo define como el “conjunto de actitudes positivas de una sociedad hacia las instituciones políticas consideradas como la forma de gobierno más apropiada”.
Los comienzos del proceso de consolidación de la democracia en España, estuvieron marcados por un fuerte sentimiento de desencanto. Se extendió la percepción de que laineficacia gubernamental de UCD estaba disminuyendo considerablemente la legitimidad inicial del sistema. Este desencanto se manifestaba en forma de desmovilización, apatía, percepciones negativas sobre la democracia y de las instituciones democráticas, la ineficacia e ineficiencia de los gobiernos, el crecimiento de las actitudes antidemocráticas o el declive de la participación electoral. Todas estasformas de desencanto, aparecían como causa y efecto de las dificultades por las que atravesaba el proceso de consolidación y eran considerados como una amenaza para la consolidación del nuevo régimen.
Las elecciones de 1982 y la victoria del partido socialista, contribuyeron a cambiar esa percepción de desencanto. El poder de un gobierno mayoritario y la recuperación económica ayudaron a ello. Lapaulatina consolidación de los principios democráticos fue así plasmándose en un cúmulo de tendencias favorables hacia el nuevo régimen.
En los últimos años, la mayoría de los ciudadanos españoles ha declarado que la democracia es la forma de gobierno más adecuada. Si intentamos buscar el origen de ese apoyo democrático, nos encontramos con distintas opiniones entre los autores estudiosos de latransición española. Así, Maravall (1978) cree que el realineamiento actitudinal de la población fue posible gracias a la preservación de ciertos valores de la cultura democrática durante la dictadura, mientras que Torcal niega que ese apoyo democrático se gestara bajo el anterior régimen no democrático y cree que los altos niveles de apoyo democrático se deben en gran medida a un proceso deresocialización adulta que generó un cambio de actitud global significativo. Según Torcal, este cambio de actitud se produjo entre los españoles en pocos años y no sólo provocó un aumento del nivel de apoyo democrático general que se ha mantenido estable desde entonces, sino que además facilitó la aparición de un apoyo democrático incondicional durante el transcurso de los primeros años delfuncionamiento del nuevo sistema. Cree también, que la política de consenso tan extendida durante la transición y consolidación democrática contribuyó de forma importante en este proceso de cambio actitudinal. Sea de una forma o de otra, lo cierto es que muchos españoles pudieron dotarse de valores democráticos y el proceso de transición pudo contar desde su inicio de una predisposición favorable entre losciudadanos.
La democracia y las instituciones democráticas disfrutan de un gran apoyo entre la ciudadanía y actualmente no existe ninguna alternativa real a las mismas. Las preferencias por un régimen autoritario o una dictadura son minoritarias y ello nos da garantías de la solidez de dicho apoyo. El paso de los años ha contribuido a ensalzar positivamente los acontecimientos que se dierondurante la transición, y el consenso y la moderación son citados como los factores del éxito del proceso.
La legitimidad de la democracia ha sido siempre la actitud dominante y la tendencia se ha mantenido en aumento. En este cuadro elaborado por Wert, vemos cómo en 1995, después de veinte años de la muerte de Franco, es cuando registra el porcentaje más alto de apoyo a la democracia. La...