Política

A cuatro meses de conclusión del sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa el balance es negativo. Podrá presumir de la macroeconomía, de logros internacionales, de una mejor imagen en el orbe,pero la razón de ser, el motivo por el cual presidió por 6 años los destinos de la nación, los mexicanos no están mejor que hace 72 meses.

Deja muchos pendientes, en primer lugar la calidad de vidano sólo se estancó, sino retrocedió lastimosamente, al grado de sumar más de 42 millones de compatriotas en pobreza y pobreza extrema. Casi cinco millones de personas están sumidas en el desempleo,pese a haberse autocalificado en 2006 como el “presidente del empleo”.

Qué decir de las cifras de muertos en su lucha contra el narco, las víctimas colaterales, de una “guerra” a la que no quisoreconocer como tal.

El atentado mayor contra la población fue su pésima política económica, la que repercutió en el bolsillo y la boca de quien prometió y protestó proteger a los mexicanos.

Susnúmeros duros al interior del país no son como para presumir y sentirse satisfecho del “deber cumplido” como dijera el clásico: por ejemplo el presidente del empleo dejará en la calle a más de 2 millones550 personas en penurias, que contando con título profesional, con habilidades técnicas, tecnológicas y de oficios, vagará de puerta en puerta buscando una oportunidad. Estas cifras son de laOrganización para la Cooperación y del Desarrollo Económico (OCDE que pronostica que tal vez hasta el segundo semestre de 2013 habría una mejora para reducir la tasa.

En esta misma línea, en la desastrosapolítica comercial del gobierno calderonista, la burocracia, la dificultad de simplificar la apertura de micro, medianas y pequeñas empresas trajo como consecuencia que en su sexenio se haya disparado a14 millones 12 mil 159 el número de personas en la informalidad, la que no aporta al erario nacional, la que evade sus responsabilidades fiscales, la que vende, distribuye, comercializa mercancía...