Presentación del libro "Entrevistas", de Jorge Santiago Perednik del día 19/10/2009

ENTREVISTAS, de Jorge Santiago Perednik.
Ed. Tres Haches, 2009. (Presentación 19/10/09)


Parafraseando a J S Perednik (a quien vamos a frasear y parafrasear sin compasión) esta presentación pudo haber sido una entrevista. Nos dice Perednik que su propuesta fue aceptar las entrevistas como una forma de hacerliteratura. Entre las variantes que analiza, habla de una épica de las ideas o de una puja entre dialogantes, cuestión que pone de relieve mediante un óleo de Arnold Böcklin: Neso y Deyanira, elegido como motivo de tapa. Pero quiero decir algo más sobre este tema de la puja o tensión que señala nuestro autor. Por un lado recordar algunos títulos de poemarios suyos: El shock de los lender, El findel no, El gran derrapador, La querella de los gustos. Aquí también nos topamos con una idea de tensión, de shock. Derrapar, shockear, querellar, son verbos que uno podría vincular con sensaciones afines a la violencia (Perednik habla del fenómeno de la violencia en una de las entrevistas). Pero estamos ante una tensión o violencia que, desde luego, debe entenderse en función del intelecto, planodonde operan sus consideraciones que, obviamente, buscan desacomodar al lector, y en definitiva incitan a tomar partido. Tengo presente un cruce de misivas (no había correo electrónico en 1988) que publicara el número 8 de Diario de Poesía a propósito de algunos aspectos de la poesía neobarroca, donde Perednik denuncia fuertes contradicciones en un artículo de García Helder, por aquelentonces miembro del consejo de redación de la revista. Es probable que, al responder una encuesta acerca del estado de la crítica de poesía en el país, publicada en la revista La Guacha (nº 19), haya considerado como referente aquel cruce de cartas del que hablaba. Según nuestro autor hace tiempo que no contamos con una crítica seria: los neorrománticos de los 80 al desconfiar de la razón se dedicarona la bio-bibliografía, a la reseña bibliográfica, mientras que en los 90 se llevó a cabo la que él llama “crítica fascinada”, en este caso la palabra no puede ser crítica debido a que se fascina a sí misma durante el discurso y pierde de vista el objeto que pretendía analizar.
Más allá de la ironía que deslizan estas observaciones, deducimos que Perednik es un autor que otorga a la polémica unimportante caudal de su energía, de su creatividad. Sin embargo, nada más saludable para la poesía argentina que esto de demarcar posiciones, señalar nuevos tópicos y defenderlos; claro, tener con qué defenderlos. En última instancia se trata del trabajo crìtico ejercido sin medias tintas y apostando fuerte por él.
Otro aspecto central del libro es cuando dice que vive la producción desus propios escritos como una aventura en el seno del lenguaje. (Tengo que decir que esta mirada me interesó mucho y apunta a marcar una diferencia con el escritor clásico, el cual, según las concepciones idealistas, enfrenta el papel en blanco sin aventurarse, a sabiendas de que lo que va a escribir ya fue concretado en la mente.)
No a los argumentos, sí a las formas, dice Perednik. Y sedefine como un poeta formalista o del lenguaje.
Hay una cuestión que debo subrayar y citar literalmente. Cuando se le pregunta a nuestro autor acerca de la utilidad de la poesía, dice: “Se podría decir que la poesía, si para algo sirve, es para que uno deje de pensar en la utilidad como medida del mundo”.
Voy a citar algunas de las precisiones que se leen en este libro: esta frase, porejemplo, recrea una muy famosa de Stéphane Mallarmé, acerca de las ideas y las palabras: “Los escritores no trabajan con fantasías, trabajan con palabras”. En otra cita arremete nada menos que contra Wallace Stevens: “La imaginación empieza a mostrar sus fallas apenas se pone a prueba sobre el papel; sobre estas fallas el poema va armando su proyecto”(creo que a partir de aquí –esto es de mi...