Que Es El Arte
En última instancia, el arte me da fe. Así dicho resulta un tanto irracional, porque resulta poco probable queunos puntos tirados sin cuidado sobre lienzo (Pollock) o unos membra disiecta (Picasso) o un lienzo azul con textura especial (Klee)puedan ponerse al mismo nivel que Dios, Allah o Budda –eso es, si creemos en su existencia–. No me refiero aquí a la fe religiosa y devota,aunque el paseo semanal por el Metropolitan Museum of Art sí podría igualarse de alguna manera con la misa de los domingos y el escape aMalta sólo para ver aquel Caravaggio en el Oratorio de San Juan con un peregrinaje a Jerusalén. Por el contrario, me parece que nodebería ser una excepción ir a un museo –como es para la mayoría de la gente la visita a la iglesia cuando la abuela lo ruega en exceso–, ni unaobligación de la que muchos no saben huir cada año en navidades. Cuando los museos y las galería se convergen con la vida cotidiana, yuna exposición se vuelve centro de una conversación en el bar de la esquina, allí origina mi emoción y la esperanza de que el arte seacapaz de cambiar el mundo. Obviamente no es el cuadro en sí que me inspira tal meta lejana e imposible, sino la actitud de quienes soncapaces de convertir violencia, injusticia, maltrato, guerras y políticas abusadoras en obras de arte, y por tanto establecer un diálogo.
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