Raza e historia. lévi- strauss

I. RAZA Y CULTURA.
Nada permite afirmar la superioridad o inferioridad intelectual de una raza con respecto a otra. El pecado original de la antropología consiste en la confusión entre la noción puramente biológica de raza y las producciones sociológicas y psicológicas de las culturas humanas. Cuando se intenta caracterizar las razas biológicas por propiedades psicológicas particulares,definiéndolas de manera positiva como negativa uno se aleja de la verdad científica. Para Gobineau de hecho, el padre de la teoría racista, la desigualdad de las razas humanas era en términos cualitativos, es decir, a partir de sus aptitudes particulares.
Lo fundamental en el análisis antropológico es que la humanidad se desarrolla a través de modos diversificados de sociedades y civilizaciones. Estadiversidad intelectual, estética y sociológica, no está unida por ninguna relación de causa-efecto como la que existe en el plano biológico.
No podemos pretender haber resuelto el problema de la desigualdad de razas humanas sólo negándolo, si no se examina tampoco el de la desigualdad —o el de la diversidad— de culturas humanas que en la conciencia pública está estrechamente ligado al de las razas.II. DIVERSIDAD DE CULTURAS.
En las sociedades humanas hay simultáneamente a la obra, unas fuerzas que trabajan en direcciones opuestas: unas tendentes al mantenimiento e incluso a la acentuación de los particularismos, mientras las otras actúan en el sentido de la convergencia y la afinidad.
Las culturas humanas no difieren entre ellas de la misma manera, ni en el mismo plano, por esto ladiversidad de culturas humanas no debe concebirse de una manera estática ya que las sociedades humanas no están jamás solas; cuando parecen estar más separadas que nunca, lo están en forma de grupos o bloques. Como el caso de norte y Sudamérica. Junto a diferencias debidas al aislamiento, hay otras también importantes, debidas a la proximidad: el deseo de oponerse, de distinguirse, de ser ellas mismas.En consecuencia, la diversidad de culturas humanas no debe invitarnos a una observación divisoria o dividida. Esta no está tanto en función del aislamiento de los grupos como de las relaciones que les unen.
El problema de la diversidad no se plantea solamente al considerar las relaciones recíprocas de las culturas, la diversidad se da también en las mismas relaciones humanas, optimum dediversidad, es así que, en el seno de cada sociedad y en todos los grupos que la constituyen surge una diversificación interna que genera ciertas diferencias a las cuales todos conceden una enorme importancia. Esta diversificación interna tiende a acrecentarse cuando la sociedad llega a ser desde otros puntos de vista, más voluminosa y más homogénea, como la India.
La diversidad de culturas humanas esde hecho en el presente mucho más grande y más rica que todo lo que estamos destinados a conocer jamás.
III. EL ETNOCENTRISMO.
La diversidad es un fenómeno natural, resultante de los contactos directos o indirectos entre las sociedades, pero la actitud más antigua y más común cuando nos encontramos en una situación inesperada consiste en repudiar pura y simplemente las formas culturales: lasmorales, religiosas, sociales y estéticas, que estén más alejadas de aquellas con las que nos identificamos. Preferimos expulsar de la cultura, a la naturaleza, todo lo que no se conforma a la norma según la cual vivimos.
De esta manera confundía la Antigüedad todo lo que no participaba de la cultura griega, con el mismo nombre de bárbaro. La civilización occidental ha utilizado después el términosalvaje en el mismo sentido.
La paradoja es que esta actitud es justamente la actitud más marcante y la más distintiva de los salvajes mismos. El bárbaro, en primer lugar, es el hombre que cree en la barbarie. En la misma medida en que pretendemos establecer una discriminación entre culturas y costumbres, nos identificamos más con aquellas que intentamos negar. En efecto, se sabe que la noción...