Reforma a La Ley 30 De 1992

Reforma a la ley 30 de 1992, debates y análisis | | | |

Lunes, 18 de Abril de 2011 17:20 |
El pasado jueves 7 de abril cerca de 224.000 personas se reunieron en 16 ciudades del país para sentar su voz de protesta contra las reformas que, el 10 de marzo del presente año, el presidente Juan Manuel Santos presentócomo solución a los problemas que hoy enfrenta la educación superior deColombia. En Bogotá,  la cuidad con mayor respuesta ciudadana a la jornada, 2.500 agentes de la policía, el Esmad y el Ejercito custodiaron ambos lados de la carrera séptima por donde más de 15.000 personas marcharon hasta la plaza del Bolívar sin importar que 5 días antes, según un informe del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) el Presidente señalara a los manifestantes, estudiantes yuniversidades presentes de tener vínculos directos con los grupos ilegales y ser títeres de intenciones “terroristas” detrás de la convocatoria. “La universidad tiene que deslindarse de esos grupos violentos que están aprovechando ciertas situaciones y estimulando ciertos escenarios, para crear violencia y generar problemas (…) muchas universidades están infiltradas por los violentos y la estrategia deestos grupos es muy clara: organizarse para hacer disturbios, actuar encapuchados, atacar a las autoridades con explosivos y luego pasar por víctimas de la Fuerza Pública”, señaló el Jefe de Estado durante  el Acuerdo para la Prosperidad que se realizó  en la ciudad de Valledupar.Pese a este señalamiento, que el rector de la Universidad Nacional categorizó como “ciencia ficción”, y a la tensiónen los días previos a la marcha por el despliegue de la Fuerza Pública con instrucciones claras de ingresar a las instalaciones educativas y controlar estrictamente la manifestación, la jornada transcurrió tranquilamente con algunas excepciones, como por ejemplo, la llegada de  agentes del Esmad en motocicletas de patrulleros a las seis de la tardeen el Chorro de Quevedo, para desalojar con gaseslacrimógenos a varios estudiantes que se encontraban en el lugar.Pero el mensaje en los medios principales quedó incompleto y las voces de  millares de colombianos y colombianas que salieron a las calles a exigir que se piense mejor esta medida, han pasado sin generar el verdadero debate que se encuentra tras las implicaciones de reformar la ley 30 y de la forma como se propone hacerlo.La ley 30 de1992 lleva 18 años en vigencia y todos los sectores coinciden en que es hora de reformarla, y aunque este cambio se venía preparando desde el anterior gobierno junto con el Ministerio de educación, la propuesta que dio hace pocas semanas el presidente Juan Manuel Santos contempla una serie de transformaciones integrales al sistema de educación superior en el país.En palabras de la Ministra deeducación, María Fernanda Campo, se podría resumir la reforma en  cuatro objetivos principales que son: “primero, mejorar la calidad del sistema; segundo, brindar un mayor acceso a la educación superior incrementando la oferta y los mecanismos para que mas jóvenes accedan y terminen sus estudios; tercero, dar una educación mas pertinente, que consulte las necesidades a nivel nacional y mundial conuna mayor innovación que demanda un presente globalizado; y por último, mejorar la transparencia y eficiencia en el sistema de la educación superior incorporando principios de buen gobierno” (Ministra de educación, UNradio, emisión: marzo 16 de 2011).Pero la reforma es bastante más compleja pues modifica de fondo el sistema de educación superior en muchísimos aspectos. En sus 50 páginas y 164artículos, es necesario analizar aquellos puntos que como asegura el Rector de la Universidad Nacional, Moisés Wasserman, no se muestran como una simple reforma sino como una ley totalmente distinta que presenta muchos aspectos que discutir, en donde el sistema financiero se convierte en el núcleo de los debates.¿Cuáles son los puntos de esta reforma que concentran y requieren mayor atención y los...