Reseña Señas De Identidad

Goytisolo, Juan, Señas de identidad, Madrid, Alianza, 2003.
Inscrita por la crítica en el grupo de la “Nueva Novela Española”, señas de identidad (1966) marcará el inicio de las nuevas propuestas literarias. El aspecto formal, desde mi perspectiva, es en donde se produce una ruptura profunda con el modelo canónico heredado del siglo decimonónico. Es evidente la asimilación de distintaspropuestas estéticas por parte de Goytisolo: las que más se perciben en esta novela, quizá por su cercanía, son las llamadas vanguardias , y aunque no encontramos al autor inscrito formalmente en alguna de ellas, las huellas que han dejado en la literatura son profundas. Así, señas de identidad incorpora algunas técnicas vanguardistas a la diégesis como: distintas voces narradoras; la historia fragmentaday el perspectivismo; introduce distintos tipos de discursos: narrativo, lírico, periodístico, comercial, policiaco, entre otros; hay variadas técnicas narrativas como el monólogo interior, diálogos y la narración omnisciente. Establece un dialogismo con un lugar y contexto histórico específico: España a partir de la guerra civil y la dictadura franquista, situación que enmarca el discurso socialmuy presente a lo largo del texto.
La estructura de la novela es de ocho capítulos y éstos a su vez se dividen en episodios, la unidad temática está dada por el recuerdo de Álvaro Mendiola quien desde el exilio en París hace un recuento de su pasado. El texto comienza con un collage de adjetivos, que posteriormente sabremos, pertenecen él mismo. Encontramos de esta manera las primeras intencionesde definir al personaje y su situación, el texto deja muy clara la opinión, bastante mala, que los otros, (a quienes podemos agrupar como españoles que han aceptado el régimen) tienen sobre Álvaro. Es precisamente este desgarramiento interior el que se narra en el siguiente episodio en el que Mendiola tiene un desdoblamiento, hace uso de la segunda voz narrativa para expresar el conflictoprincipal que le atormenta y que da tema a la novela: la falta de identidad. Para él su familia es ajena, ellos se encuentran “encastillados en sus inexpugnables privilegios de clase, miembros de un mundo otoñal y caduco” , trata de escapar a las morales, leyes y religión que le dieron, movido por un heredado y (piensa en algún momento él) romántico deseo de cambio, de catarsis que lo lleva al exilioy con ello la culpabilidad, el sentimiento de traición a su patria y a los suyos.
El acertado traslape temporal del discurso lo observo en dos tiempos: la enunciación situada alrededor del año 63, con un personaje de 32 años, casado y en su hogar, frente a una botella de vino y el inicio del fúnebre Requiem de Mozart, viendo fotos, trayendo a su mente recuerdos para reconstruir su propiahistoria, que por otro lado no se explica sin los componentes sociales de la guerra y dictadura españolas. El segundo momento es narrativamente hablando, una analepsis en la que a través de la imagen evoca el recuerdo de su infancia, adolescencia y primeros años de juventud, sin embargo, no es lineal esta sucesión de hechos.
En un recuento muy breve, puedo decir que Álvaro Mendiola hijo de familiasde estirpe burguesa, de posición ideológica de derecha y católica; por parte de su familia paterna poseedores de fincas en Cuba, por el lado materno tiene una abuela que padece demencia tras concluir la guerra civil y posteriormente muere, le enseña este episodio le efímero de la vida; muere su padre en Yeste a manos del frente popular. Al avanzar el tiempo, su familia de derecha se vuelvefalangista, muere su madre alrededor del año 44 y al margen de la segunda guerra mundial vive su adolescencia y orfandad.La influencia pesimista de su tío Eulogio sobre la visión de Europa se traduce en el joven Álvaro, en miedo a la guerra que se transforma en algo personal, le parece que en cualquier momento lo rojos lo van matar; siente una “absorbente pasión” por un hombre de nombre Jerónimo (el...