Revolución Española

INTRODUCCIÓN.-
El historiador estadounidense Crane Brinton, tomando como objeto de análisis cuatro grandes revoluciones, como son la inglesa del S.XVII, la americana, la francesa y la rusa de 1917, elaboró un modelo o patrón que debería ser común para todas las revoluciones existentes.[1]


Tanto desde un punto de vista temporal como espacial, podríamos decir que los sucesos queserán narrados en este ensayo no son muy lejanos al momento actual, hecho por el cual, podría resultar práctico a la vez que atractivo el conocer las diversas circunstancias socio-políticas que tuvieron lugar en la España de la II República.
Concretamente éstos sucesos tuvieron lugar en nuestro país entre los años 1936 y 1939, en el periodo que transcurrió desde la victoria del denominado FrentePopular en las elecciones de febrero del año 1936, hasta el momento en el que el militar dictador Francisco Franco consiguió entrar en Madrid junto con tropas militares a su mando, dándose por finalizada la conocida Guerra Civil española en abril del año 1939.


No obstante, no debemos pensar que este ensayo se trata de un mero relato de sucesos históricos ordenados de forma cronológica,sino más bien de la reseña de diversos acontecimientos que permitirán realizar una posterior comparación con respecto a los procesos contemplados como necesarios en el modelo de Brinton.
Finalmente, una vez analizadas todas estas cuestiones, estaremos en plena disposición de determinar si el modelo elaborado por el autor estadounidense coincide con los hechos sucedidos en la denominada“revolución española”, o en caso contrario, mencionar las distintas particularidades contempladas que escapan al modelo de revolución del citado autor.


DESARROLLO.-
Situarnos directamente a principios del año 1936 sin efectuar una breve reseña de distintos acontecimientos “previos” al inicio de la denominada revolución española, podría hacer que este ensayo adoleciera de la informaciónnecesaria para comprender de una manera exhaustiva todos los hechos que serán narrados posteriormente.
En este sentido es justo mencionar que la instauración de la II República española el 14 de abril de 1931 no consiguió solventar una serie de problemas que existían en nuestro país con anterioridad, tales como la problemática separación entre Iglesia y Estado, la voluntad independentista de vascos ycatalanes…
Asimismo, la entrada en el Gobierno en el año 1934 de miembros de la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA) produjo una serie de huelgas convocadas por los socialistas que pudieron ser controladas rápidamente por el gobierno, a excepción de la producida en Asturias, donde los mineros, apoyados por anarquistas y comunistas, llevaron a cabo actos como la destrucción deIglesias, ocupaciones de tierras, quemas de títulos de propiedad y ocupaciones de acuartelamientos de Guardia Civil; hechos que dieron lugar a una encarnizada lucha de poder en una cruel batalla denominada como “Batalla de Asturias”.[2]
Finalmente, utilizando métodos realmente salvajes, el Gobierno de la República consiguió ganar la batalla, dando comienzo entonces a un periodo de represión contra losrevolucionarios y retroceso en cuanto a los derechos y condiciones laborales de los trabajadores, en una época que llegó a ser denominada por los izquierdistas como el “bienio negro español”.[3]


Los hechos mencionados, lejos de ser olvidados, constituyeron el germen que hizo brotar la necesidad de cambio en una sociedad que observaba el cada vez mayor “antagonismo de clases” entreburgueses y campesinos, “antagonismo político” entre fuerzas de derecha e izquierda, y que, junto con el deseo de venganza por parte de los fuertemente reprimidos durante el “bienio negro”, dieron como resultado el obtenido en las elecciones electorales del 16 de febrero de 1936, donde la victoria fue para el Frente Popular, coalición formada por partidos políticos de izquierda, socialistas y...