Secuestro

Cuando las víctimas se llegan a identificar con el agresor se produce el síndrome de Estocolmo. Es así como podemos hablar de secuestradores:

-Blandos
-Duros
-Sádicos
-Indiferentes
-Maduros
-Con escolaridad media
-Con complejo de Ícaro
CARACTERÍSTICAS DE RESPUESTA AL TRAUMA
Horowitz describió cinco fases características de respuesta al trauma de secuestro, que son:
a)Fase de dolor: es una respuesta inmediata al hecho traumático.
b) Fase de negación: se manifiesta por amnesia, insensibilidad, trastorno del sueño, síntomas somáticos, hiperactividad y/o retraimiento.
c) Fase intrusora: síntomas de la fase intrusora, como pensamientos invasores, labilidad afectiva, trastorno del sueño y sobresaltos, originará ansiedad y temor de perder el juicio, lo quemotiva que la persona que lo padece busque ayuda.
d) Fase de elaboración: esta fase permite al sujeto elaborar el duelo de las pérdidas y las heridas recibidas y reconsiderar nuevos planes que le posibiliten enfrentar lo futuro.
e) fase de consumación: se alcanza cuando la persona reconoce los efectos del trauma sobre su estructura psíquica, elabora planes a futuro y reinicia actividadeslaborales y de esparcimiento.
TRATAMIENTO
Una intervención temprana en las agencias del Ministerio Público evitará que el trastorno por estrés postraumático se prolongue, por lo que se requieren profesionales sensibles y maduros o, en su defecto, expertos de la salud mental, tales como trabajadores sociales, psicólogos y psiquiatras, que sean capaces de proporcionar:
Asistencia inmediataAsistencia a lo largo del proceso
Canalizaciones a grupos de apoyo
4 Supervisión de la evolución del cuadro
ATENCIÓN Y MANEJO DE LOS FAMILIARES VÍCTIMAS DEL DELITO
A tal grado llega el aprecio de la libertad que en nuestro país la mayor sanción que puede imponerse al delincuente es precisamente perderla.
Los daños ocasionados a la víctima y su familia, a diferencia deotros delitos, permanecen a través del tiempo con secuelas psíquicas que quedarán de por vida prolongando la amarga experiencia, sin olvidamos de los daños físicos, que en muchas ocasiones llegan a ser igualmente permanentes debido al carácter sanguinario del secuestrador, que no se tienta el corazón para cercenar miembros a la víctima, dejando con ello una marca indeleble de su reprochableconducta.
Durante la ausencia del secuestrado la impotencia de la familia al no saber qué hacer, a quién acudir o dónde obtener la suma exigida para la liberación de su ser querido —cuando éste es el caso— produce frustración y rabia entre sus integrantes, aumentando las discusiones y los conflictos debido a su afán de garantizar la vida y la integridad de la víctima y tratar de pagar el precio fijadopor el secuestrador.
Por lo cual los integrantes de la familia, con la intención de solidarizarse con la víctima, pueden dejar de dormir, de comer o de efectuar cualquier otra labor que pudiere motivar su distracción.
El propio secuestrador aprovecha la condición de angustia para obtener el rescate o la realización de la conducta que se ha puesto como condición para la liberación de lavíctima, por lo cual ejercerá de manera constante una presión sobre los sentimientos y los temores de la familia. En estos casos nuestro papel es otorgar a la familia de la víctima el apoyo para generar en ella sentimiento de seguridad y ganar su confianza.
En un secuestro planeado el delincuente elige a la persona que a su entender le represente la certeza de que la familia estará más dispuesta apagar un rescate y aceptar las condiciones que le imponga, debido al valor afectivo que representa para todos sus miembros esa persona. De igual forma, tenemos que considerar que este tipo de víctima es precisamente el más propenso a morir en el trance del cautiverio, debido a la angustia que vive por su situación personal y el saber del desamparo y la desestabilidad que puede haber en su familia...