Solo un cuento
-¡Auxilio!Escuche una voz de mujer, me levanté y busqué de donde venía, camine una poco más y volví a escuchar un grito.
-¡Ayuda! ¡Alguien que me ayude por favor!
En ese momento reconocí de donde venía la voz,así que me di media vuelta y corrí unos metros más adelante, había un avión roto, todavía le salía humo de la parte del motor, supuse que la mujer que gritaba venía de ahí, así que corrí aún másrápido levanté un ala rota que se encontraba ahí y escuché aún más fuerte los gritos, me asomé a la cabina del piloto y la ventana se encontraba rota, y no solo eso, también había una mujer, me parece queera la misma que gritaba ayuda, me exalte un poco y traté de sacarla lo más rápido y cuidadosamente posible, por suerte ella seguía consiente, pero me asustó el charco de sangre que había a su lado.-Emilio ¿Qué haces aquí?
Dijo la señora sorprendida, pero lamentablemente yo no sabía quién era Emilio.
-¿Quién?
Ella me quería contestar, pero no paraba de toser, así que le dije:
-Para, para.
Lecubrí la cabeza con una tela que encontré alado de ella y espere a que parara la sangre, ella se estaba perdiendo el sentido así que la cargué con las manos ensangrentadas hasta el mar, mojé el trapo yle limpié la sangre, le amarré el trapo con doble nudo y la deje encima del ala rota con la esperanza de que despertara en un rato.
No sabía qué hacer, tenía tantas preguntas y ninguna respuesta,...
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