Suicidio. durkheim

El Suicidio.
Las situaciones de las que depende el suicidio son de dos clases: la situación en la que se encuentra el agente (hombres que han sufrido disgustos de familia, decepciones de amor propio, víctimas de una enfermedad…) aunque estas causas individuales no podrían duplicar el porcentaje social de los suicidios pq varia en en proporciones considerables. Y por otra parte las circunstanciasen las que in hombre se suicida que son casi infinitas (uno se mata en la abundancia, otro en la pobreza, uno era desgraciado en su hogar, otro acaba de romper un matrimonio que lo hacía infortunado...)
El autor se hace la pregunta ¿Podríamos atribuir esta causalidad a los caracteres que son comunes a todos? ¿Existen estos caracteres? Y responde que solo se puede decir que son disgustos sin quepueda determinar la intensidad que pueda alcanzar el dolor para que haya esta trágica consecuencia. No hay descontento en esta vida que se pueda decir a priori que pueda causar el suicidio. Hay que señalar que los individuos que más sufren no son los que más se matan. Es más bien el excesivo bienestar el que arma al hombre contra sí mismo.
El suicidio ha sido presentado como un episodio deneurastenia, sometido a los mismos factores que ella, pero el autor no ha encontrado ninguna relación entre la neurastenia y el proceso social de los suicidios. Incluso sucede que estos dos hechos varían de forma inversa el uno del otro y que el uno está en su mínimo y en el mismo momento y lugar que el otro alcanza su máximo.
Diferentes son los resultados cuando los hemos buscado en la naturalezasocial de las mismas, tan equivocadas eran las relaciones del suicidio con los hechos del orden biológico y el orden físico, como son inmediatas y constantes con ciertos estados del medio social.
Por otra parte la constancia de la cifra social de los suicidios, bastaría por si sola para demostrar la exactitud de esta conclusión. Si por razón de método hemos creído un deber de reservarlo hastaahora, el problema no tiene otra solución.
Cuando Quetelet llamo la atención de los filósofos sobre la regularidad sobre la que ciertos fenómenos sociales se repiten durante ciertos periodos idénticos de tiempo, creyó poder dar cuenta de ello por su teoría del hombre medio que ha quedado como la única explicación de esta propiedad.
Explica que la tendencia a matarse es una rareza y una anomalía,ajena al tipo del medio y por consiguiente, un conocimiento que está muy lejos de ayudarnos a comprender como sucede que el número de suicidios es constante para una misma sociedad, su teoría reposa sobre una observación inexacta.
Los individuos que componen una sociedad cambian de un año a otro, sin embargo el número de suicidios es el mismo, en tanto que la sociedad misma no cambia...
Aunquelos miembros de las diversas sociedades europeas pertenezcan a tipos medios muy diferentes los unos a los otros, las variaciones por estación y por meses de los suicidios, tienen lugar en todas partes, siguiendo idéntica ley. Se dirá que es el género de vida el que produce los efectos. No hay suicidios todos los años sino que por regla general, cada año hay tantos como el precedente
¿Sera precisoimaginar que cada suicida ha tenido por iniciador y por maestro, de alguna manera a una víctima del año precedente de la que es como un heredero moral? Con esta sola condición es posible concebir que la cifra social de los suicidios pueda perpetuarse por medio de tradiciones inter-individuales.
Las tendencias colectivas tienen una existencia que les es propia, son fuerzas tan reales como lasfuerzas cósmicas aun cuando sean de otra naturaleza. Cuando comprobamos que el número de fallecimientos varía muy poco de un año a otro, nos explicamos esta regularidad diciendo que la mortalidad depende de fuerzas materiales, que siendo independientes de los individuos permanecen constantes cuando las generaciones cambian.
La primera aseveración es una negación atrevida de toda la psicología...