Suplencia de la confesión
Páginas: 2 (267 palabras)
Publicado: 16 de mayo de 2011
Suplencia de la confesión mediante el acto de contrición perfecta.
Este trabajo está realizado teniendo en cuenta el Código de Derecho Canónico de 1917 y también dellibro del Nuevo Derecho Parroquial.
Se acepta sola y exclusivamente cuando concurran estas dos condiciones: motivo grave y no haber oportunidad de confesarse.a) Motivo grave.
El CIC de 1917 inspirado en el Concilio de Trento hablaba de la necesidad urgente. La nueva redacción lo interpreta de forma más amplia.Las aplicaciones tradicionales: peligro de muerte, riesgo próximo de profanación de las especies eucarísticas, peligro de escándalo o de difamación si no comulgara enaquella ocasión…) pueden ser hoy ampliadas dada la práctica actual de la comunión frecuente.
En el caso del sacerdote celebrante, el motivo grave puede darsemás fácilmente por la necesidad de celebrar en razón a su oficio, que de otra manera quedaría desatendida.
b) Falta de oportunidad para confesarse.
El CICde 1917 habla de “no disponer de confesor”.
Los autores solían interpretarlo con largueza: si ningún confesor está presente ni se puede acudir al ausente a noser con gran dificultad, si el que está presente desconoce la lengua o no se puede acudir a él sin grave daño propio o ajeno, extrínseco a la confesión, por ser de lamisma familia, por la peculiar relación “párroco-vicario-coadjutor”…
Por eso, con mayor justeza, el nuevo Código habla de falta de oportunidad para confesar, encuanto que no basta el mero hecho físico de la presencia si llevara unida una grave dificultad moral, extrínseca a la confesión, para acusar su falta que está presente.
Este trabajo está realizado teniendo en cuenta el Código de Derecho Canónico de 1917 y también dellibro del Nuevo Derecho Parroquial.
Se acepta sola y exclusivamente cuando concurran estas dos condiciones: motivo grave y no haber oportunidad de confesarse.a) Motivo grave.
El CIC de 1917 inspirado en el Concilio de Trento hablaba de la necesidad urgente. La nueva redacción lo interpreta de forma más amplia.Las aplicaciones tradicionales: peligro de muerte, riesgo próximo de profanación de las especies eucarísticas, peligro de escándalo o de difamación si no comulgara enaquella ocasión…) pueden ser hoy ampliadas dada la práctica actual de la comunión frecuente.
En el caso del sacerdote celebrante, el motivo grave puede darsemás fácilmente por la necesidad de celebrar en razón a su oficio, que de otra manera quedaría desatendida.
b) Falta de oportunidad para confesarse.
El CICde 1917 habla de “no disponer de confesor”.
Los autores solían interpretarlo con largueza: si ningún confesor está presente ni se puede acudir al ausente a noser con gran dificultad, si el que está presente desconoce la lengua o no se puede acudir a él sin grave daño propio o ajeno, extrínseco a la confesión, por ser de lamisma familia, por la peculiar relación “párroco-vicario-coadjutor”…
Por eso, con mayor justeza, el nuevo Código habla de falta de oportunidad para confesar, encuanto que no basta el mero hecho físico de la presencia si llevara unida una grave dificultad moral, extrínseca a la confesión, para acusar su falta que está presente.
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