Syd Barrett
Páginas: 2 (303 palabras)
Publicado: 7 de octubre de 2015
Syd Barrett, el auténtico diamante loco de Pink Floyd....
En el libro Rojo Floyd, el italiano Michele Mari repasa la vida del creador de Pink Floyd.
Syd Barrett es, al igualque Jimi Hendrix, Janis Joplin, Jim Morrison o Brian Jones, otro genio del rock de los '60, pero a diferencia de ellos, que tuvieron una muerte prematura, murió en 2006, cuandotenía 60 años.
Ahora, una novela del italiano Michele Mari -Rojo Floyd- indaga en el Pink Floyd perdido y sostiene la tesis de que Barrett siempre estuvo ahí, que su huella y suimaginario permanecieron en la obra de la banda. Y, menos comprobable, que su sombra persiguió sin tregua al grupo, que el complejo de culpa, casi freudiano, por su caída atormentó asus compañeros todo este tiempo.
Nick Mason había narrado con toda la crudeza en otro libro (Dentro de Pink Floyd, Ma Non Troppo, 2007) cómo se resolvió su despido. "En el coche,de camino, alguien dijo: '¿Recogemos a Syd?', y la respuesta fue: 'No, joder, no vale la pena'. La decisión fue completamente cruel, igual que nosotros".
De ser un creativoamparado en el ácido lisérgico, Barrett se encerró en su impenetrable cerebro. En el escenario se quedaba abstraído sin aviso, o tocaba una misma nota sin parar, así que le tenía queapoyar otro guitarrista, su amigo David Gilmour, que acabó sustituyéndole del todo. Aceptó su expulsión sin rechistar, y sus excompañeros le ayudaron a editar dos discos en solitario,menos comerciales, antes de desaparecer por completo.
Sobre la raíz de su desequilibrio no acaba de haber una versión concluyente. Sus compañeros lo consideraban esquizofrenia.Un estudio publicado en 2007 en The American Journal of Psychiatry sostiene que su genio derivó a un estado psicótico, pero ese camino ya lo seguía antes de probar el ácido.
Syd Barrett, el auténtico diamante loco de Pink Floyd....
En el libro Rojo Floyd, el italiano Michele Mari repasa la vida del creador de Pink Floyd.
Syd Barrett es, al igualque Jimi Hendrix, Janis Joplin, Jim Morrison o Brian Jones, otro genio del rock de los '60, pero a diferencia de ellos, que tuvieron una muerte prematura, murió en 2006, cuandotenía 60 años.
Ahora, una novela del italiano Michele Mari -Rojo Floyd- indaga en el Pink Floyd perdido y sostiene la tesis de que Barrett siempre estuvo ahí, que su huella y suimaginario permanecieron en la obra de la banda. Y, menos comprobable, que su sombra persiguió sin tregua al grupo, que el complejo de culpa, casi freudiano, por su caída atormentó asus compañeros todo este tiempo.
Nick Mason había narrado con toda la crudeza en otro libro (Dentro de Pink Floyd, Ma Non Troppo, 2007) cómo se resolvió su despido. "En el coche,de camino, alguien dijo: '¿Recogemos a Syd?', y la respuesta fue: 'No, joder, no vale la pena'. La decisión fue completamente cruel, igual que nosotros".
De ser un creativoamparado en el ácido lisérgico, Barrett se encerró en su impenetrable cerebro. En el escenario se quedaba abstraído sin aviso, o tocaba una misma nota sin parar, así que le tenía queapoyar otro guitarrista, su amigo David Gilmour, que acabó sustituyéndole del todo. Aceptó su expulsión sin rechistar, y sus excompañeros le ayudaron a editar dos discos en solitario,menos comerciales, antes de desaparecer por completo.
Sobre la raíz de su desequilibrio no acaba de haber una versión concluyente. Sus compañeros lo consideraban esquizofrenia.Un estudio publicado en 2007 en The American Journal of Psychiatry sostiene que su genio derivó a un estado psicótico, pero ese camino ya lo seguía antes de probar el ácido.
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