tecnologia

La ciudad de Rosario presenta su carácter particular, en el sentido de que a diferencia de otros centros urbanos, no tuvo un fundador definido ni ceremonia de emplazamiento del rollo fundacional alguna. Puede decirse que las tierras en donde hoy se alza Rosario, eran entonces tierras que no pertenecían ni al señorío ni a las órdenes, pero el 29 de agosto de 1689, el gobernador y capitán generalde las Provincias del río de la Plata, Juan de Herrera y Sotomayor, donó al antiguo vecino de Santa Fe capitán Luis Romero de Pineda, en nombre del rey, una parcela de 27 leguas, al sur de esa ciudad, comprendida entre el río Paraná al este, en el arroyo Salinas (ahora Ludueña) al norte, y el paraje llamado Matanzas, al sur entre los que hoy son arroyos Frías y Seco, y todo lo que pertenece sindueño al oeste. El 27 de diciembre de 1689, Romero de Pineda tomó posesión. A su muerte en 1695, la merced fue dividida entre sus dos herederas: Francisca, casada con Cristóbal González Recio y Juana, esposa de Juan Gómez Recio.
El proceso de creación de propiedad territorial fue acompañado con la asimilación o el exterminio del indígena. En los archivos, planos y censos catastrales fueronregistrándose los nombres de generales, capitanes y licenciados ligados a los parcelamientos de solares, chacras y estancias. De estos últimos derivaron los herederos posteriores, caudillos y gobernadores (BACLINI Y CAMPAZAS, 1989).
A lo largo de los años fueron estableciéndose algunos pobladores en este lugar llamado “Pago de los Arroyos”. El censo de 1741 dio como resultado 248 vecinos dispersos por todael área.
Durante el siguiente siglo, Nicasio Oroño, jurista y gobernador de Santa Fe entre 1864 y 1868, estaba afincado en Rosario, y ya vislumbrando el porvenir de la futura ciudad, en 1854 pidió al Presidente Urquiza que gestionara ante el gobierno provincial, la organización política y administrativa del departamento Rosario. Oroño, desarrolló una acción progresista desde el punto de vistaedilicio. Entre otras cosas, fue el encargado de dotar de nombre a las calles, numerar las fincas para su localización, rellenó la laguna Sánchez que se hallaba cerca de la plaza e impedía la expansión de la ciudad. Durante todo este período, se alzaron edificios de importancia como los palacetes que se levantaron en los bulevares Santafesino (ahora Oroño) y Argentino (Av. Pellegrini), laMunicipalidad, los Tribunales Provinciales, teatros y grandes hoteles. Aparecieron en las calles los tranvías de tracción a sangre, el alumbrado público del centro se realizó mediante el empleo de gas, y desde 1891 a través de la energía eléctrica, comenzaron a funcionar los teléfonos.
Todo este proceso fue acompañado por un notable crecimiento demográfico.
Para 1869 la ciudad contaba con 23.169habitantes. Hubo un gran aporte de inmigrantes que para la década 1870-80 llegaban a 3.000 por año. Ya para 1910, el censo arrojó un resultado de 192.278 habitantes, de los cuales 89.602 en extranjeros. La ciudad se fue expandiendo hacia el norte, el sur y el oeste con la formación de nuevos barrios. En cuanto a las edificaciones, a las casas de categoría que se seguían construyendo, se le agregaban otrasmenos lujosas pero de material. Había pocos ranchos o habitaciones de lata y madera. El 90% de las casas poseían agua corriente y muchas contaban con teléfonos.
Luego de la crisis del ’29 se pudieron concretar obras que habían quedado postergadas. Se hicieron nuevas plazas y parques como el Ludueña (hoy Leandro N. Alem), la avenida costanera, y se abrieron nuevas avenidas. Por estos años selevantó el edificio del Jockey Club, la Estación de Ferrocarril de la provincia de Santa Fe, el Correo Central, la Aduana, el Palacio Fuentes y la Bolsa de Comercio, entre otros.
A partir de la década del ’40 se produce un estancamiento del crecimiento sostenido que venía teniendo la ciudad. Esto se debe en parte a la política centralizadora por parte de Buenos Aires, y a la paralización portuaria...