Teteles

EN TETELES UN SIGLO EN MANOS DE SOLEDAD
Tierra indómita, tierra de ninguno que haya querido conquistarte; de nadie te has enamorado, de nadie te has prendado y a nadie has hecho tuyo. Tantos corazones has roto tierra egoísta y cruel, ni a los nacidos en ti, ni a los llegados a ti has aceptado como tuyos. Tierra de ninguna raza, tierra de ninguna nacionalidad, tierra de quimeras que solo cobijasa la muerte, como tu nombre lo dice, solo sirves para sepulcro de monarcas. A nadie has llamado tuyo y todos muy en el fondo quieren liberarse de ti y de tu hechizo de noches de estrellas y ríos floridos y leyendas y misterios. Tierra, eres ojos que vigilan y lazo que ata y eres embriaguez que hace olvidar todo lo pasado. Tierra como encanto que en tu seno no corre el tiempo, todo se detiene, aveces va hacia atrás, a veces el aire limpio que trae recuerdos te ataca por sorpresa, pero siempre llega la niebla a la zaga para volver a enturbiar las conciencias y hacer olvidar. Nunca te entregas a nadie tierra querida y sin embargo tantos corazones a lo largo de milenios se han entregado a ti por completo. De incontables no se tiene ni el recuerdo, tal vez sea que nunca generaste, solo hasrecibido a lo largo de tu vida y tu espíritu que nació solo, desea morir solo por que se cansó de esperar hijos verdaderos, hijos de tus entrañas, de tu vientre del que solo nacen las lombrices y la vegetación salvaje que no ama ni canta. Al morir todos regresan a ti, cruel los devoras para finalmente en la muerte hacerlos tuyos, como un parto hacia adentro, un parto hacia atrás. De otros solo se haescuchado hablar de lejos, como si de pronto los cerros que te rodean quisieran contar las historias de aquellos que aún resuenan, caminantes de una cultura perdida, una cultura que pasó y se fue, borrada a sangre y fuego. Los ancianos también cuentan las historias de sus padres, de sus abuelos memoriales, de aquellos que llegaron a ti con sus baúles llenos de ilusiones y sus bolsillos vacíos, yque te ofrendaron sus manos y su cariño para cultivarte, para que sintieras ese amor de madre y sin embargo has rechazado a todos ellos, todos sus intentos. Y más cierto pareciera que deseas volverte hacia adentro, reducirte, implosionar… desaparecer. Teteles de ilustrísimos personajes, Teteles de roca atemporal, ¿dónde quedó tu espíritu y tu esencia a sabiduría y aire limpio? Mírate Teteles en unespejo y dime si con el paso de los siglos has conseguido lo que buscabas pues puedo decirte que ciertamente me entristezco del estado de deterioro de tus escuelas, monumentos y templos, me apeno de la mezquindad y canibalismo de tus habitantes que solo piensan en su conveniencia y han olvidado el verdadero espíritu de una vida en comunidad. Teteles ya basta de vivir de viejas glorias y decolgarte laureles empolvados, es hora de despertar, de trabajar en beneficio de todos y no para ser notados unos más que otros ni por la “pompa y circunstancia” que ello implique, es momento de valorar lo que verdaderamente es importante, de recuperar la esencia, volver a las raíces sin guindarnos de nuestros nombres o apellidos o antepasados, es momento de reconstruir no de deconstruir; respetarnuestro legado y nuestro patrimonio que cada vez parecen más deteriorados, o si no díganme ¿dónde están los rojos tejados de ese bello pueblito enclavado en la sierra norte y que tanto alegraban a la vista? Y ¿Por qué en vez de ellos nos encontramos con horribles estructuras que se han ido añadiendo a las viejas casas y sobre todo a la terrible “remodelación” que se hizo a la joya que solía ser nuestraquerida parroquia y que en vez de dialogar con ella solo rompe su espíritu y habla de la ceguera cotidiana de quienes la proyectaron y sobre todo de quienes la permitimos, porque sería lo mismo que cortarle las alas al Ángel de la independencia o talar una parte del bosque de Chapultepec para construir encima con la bandera del “progreso”. Recordemos que la belleza reside en la originalidad no...