The Cared for Caregiving readings in knowledge

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ENTREGA DE CUIDADO

LECTURAS SOBRE CONOCIMIENTO,
PRÁCTICA, ÉTICA Y POLÍTICA
Noddings, Nel. The Cared-For. Caregiving Readings in Knowledge, Practice, Ethics and Politics. Gordon, Suzanne. Benner, Patricia.
Noddings, Nel. Ed. University Pennsylvania Press, Philadelphia, 1996, cap3. pp. 21-39.
EL PROFESIONAL QUE CUIDA, Nel Noddings
En este capítulo, comienzo con una revisión de lo que significacuidado. Luego, confieso parte de la ambivalencia acerca de la
naturaleza del profesionalismo-por lo menos cuando implica la profesionalización. Finalmente, exploro- dadas mis reservas acerca
de la profesionalización lo que puede significar para los profesores ser "profesionales que cuidan". Aunque me concentro en la
enseñanza, la mayoría de lo que digo se puede aplicar a pagar las profesiones deentrega de cuidado.
Lo que significa cuidar
El cuidado, según lo señalo en un ensayo anterior en este volumen, es un tipo particular de relación entre dos personas- una que
cuida y una "cuidada" (ver también Noddings 1984) Puede ocurrir en un breve episodio o en una relación extendida a través del
tiempo. En este último caso, algunas relaciones de cuidado son mutuas; esto es, los miembros de larelación cambian posiciones
regularmente, compartiendo las responsabilidades de dar y recibir cuidado. Usualmente esperamos que las relaciones entre
esposos, amistades y relaciones en el colegio (pares) sean de este tipo. De hecho, nos decepcionan cuando la otra parte en tal
relación falla en la reciprocidad al aceptar la posición de cuidador. Pero algunas relaciones extensas son desiguales en sumisma
naturaleza: adulto-niño, profesor-estudiante, enfermera-paciente todos son ejemplos de relaciones en las que el primer miembro
tiene casi exclusivamente la responsabilidad como cuidador. Sin embargo, incluso en esas relaciones, la segunda parte contribuye
en gran manera si la relación se puede describir apropiadamente como cuidado.
Cuando cuidamos-estamos en la posición de cuidador- nuestraconciencia exhibe dos características fundamentales. Primero,
estamos en un modo receptivo. Ayudamos de forma no selectiva a la persona cuidada. Estamos, por lo menos momentáneamente,
involucrados en los planes, dolores, y esperanzas del otro, no en los nuestros. Segundo, sentimos que nuestra energía fluye hacia el
otro. Queremos ayudar a ampliar el plan, aliviar el dolor, o hacer realidad laesperanza. Lo que realmente hacemos para determinar
nuestra parte en la relación de cuidado está relacionado con muchos factores, pero estas dos características fundamentales
describen nuestra conciencia básica.
El receptor del cuidado, la persona cuidada, contribuye con la relación al responder de forma positiva a los esfuerzos del cuidador.
Un infante puede sonreír, arrullar o a abrazar. Un estudiantepuede mirar hacia arriba con los ojos iluminados. Un paciente pueda
sentir afirmativamente-"¡Sí, lo tiene-ahí es donde me duele!" Estas respuestas, como todos los padres, profesores, médicos y
enfermeras saben, no son despreciables. Una relación no se puede etiquetar apropiadamente como cuidado en su ausencia. La
respuesta no sólo completa la relación, sino que brinda el material con el que loscuidadores monitorean los efectos de sus
esfuerzos de cuidado. Es parte de lo que el cuidado recibe en la siguiente ronda del cuidado.
Las cosas que he descrito hasta ahora son, pienso, universalmente verdaderas para las relaciones de cuidado. En los momentos de
cuidado, los cuidadores ayudan y sienten que su energía de motivación fluye hacia la persona cuidada; esta última, realiza algún
tipo derespuesta que completa la relación. Pero más allá de esta descripción básica de dos conciencias que se encuentran en una
relación de cuidado, lo que las personas reales y concretas hacen varía con la situación; es más, varía en el tiempo y en las
culturas, incluso según las personalidades y estados de ánimo. Esta variedad es sin duda parte lo que significa cuidar. Si trato al
bien exactamente...