Tiempo y narración: la triple mímesis.

Tiempo y narración: la triple mímesis.

Dice Paul Ricoeur: “el tiempo se hace tiempo humano en la medida en que se articula en un modo narrativo, y la narración alcanza su plena significación cuando se convierte en una condición de la existencia temporal”[1]. De este modo, el autor vincula al relato con la concepción del tiempo (más bien, con la percepción propia del tiempo) que el hombretiene.
Esto es lo mismo que decir que la relación que se establece entre la acción, en tanto que tiempo transcurrido y vivido, y la narración, es una relación del tipo “necesaria”: no hay manera de “entender” el tiempo si no es a través del relato. La filosofía puede abstraer esta noción y llevar a cabo sus diferentes consideraciones, pero previo a su filosofar, el hombre es un ser que cuenta y que enel acto de contar está entendiendo y transmitiendo su visión del tiempo.
Jerome Bruner, por ejemplo, un psicólogo y padre de la llamada “revolución cognitiva”, estudia el caso de una niña con ciertas patologías del aprendizaje y descubre que su principal inconveniente es la incapacidad de “narrar correctamente sus experiencias”. Escuchémoslo a él:
“Hay algo curioso en la autobiografía. Es unrelato efectuado por un narrador en el aquí y ahora sobre un protagonista que lleva su nombre y que existía en el allí y entonces, y la historia termina en el presente, cuando el protagonista se funde con el narrador. Los episodios narrativos que componen la historia de una vida presentan una estructura típicamente laboviana, adhiriéndose estrictamente a la secuencia y a la justificación en funciónde la excepcionalidad. Pero la historia mayor revela una fuerte vena retórica, como justificando por qué era necesario (no en un sentido causal, sino moral, social, psicológico) que la vida sigue un camino determinado. El Yo, cuando es protagonista, siempre está, por así decir, apuntando hacia el futuro.”[2]
Y más adelante:
“Una narración, al fin y al cabo, no es solamente una trama, una fábula,sino también una forma de contar (…). “[3]
Desde su perspectiva psicológica, Bruner intenta develar que narrar es “configurar” hacia el futuro, que la narración tiene sentido en su contexto axiológico y que sirve para demostrar la validez de una vida contada, especialmente cuando se trata de un relato autobiográfico. Es como que debemos pensar que detrás de toda narración de apariencia ingenuase esconde una trama mayor, la trama del individuo que necesita justificar su existencia ubicando los diferentes componentes de lo narratológico como aspectos significativos y significantes de su vida.
Esto es aplicable tanto a la literatura como a cualquier tipo de discurso narrativo (historia, relato de una persona hecho de modo oral, tradiciones folklóricas, etc.).
Para ofrecer un modeloteórico que intente adecuarse a esta vinculación entre tiempo y relato, Ricoeur apela al esquema de la triple mímesis.
En primer lugar, es conveniente subrayar que el concepto de “mímesis” está extraído de la “Poética” de Aristóteles, en la que se utiliza esta expresión para definir la naturaleza del arte: “el arte es mímesis”, dice el filósofo, esto es, imitación. Está claro al día de hoy que ya no sediscute que “mímesis” se entiende como imitación de los “mecanismos” y no en tanto que simple copia de la realidad. Así, el escultor “imita” el modo de funcionar del cuerpo cuando esculpe un desnudo en la piedra. En este aspecto, el “Pensador” de Rodin y las esculturas no figurativas de un Líbero Badii no escapan a la definición, pues ambas imitan el modo de ser de la naturaleza: ambas utilizanmateriales diversos para imitar el acto de ser y de ser creado de la naturaleza. “Mímesis” es la imitación del ser, del ser como existente en el tiempo y en el espacio. El ser es en sí, tiene entidad por sí mismo: el arte parece, no es. Su entidad existe (valga la redundancia) en tanto que hace referencia a un otro. Un cuadro de Mondriain refiere a otros cuadros que lo preceden (a los que niega...