Tragicomedia De Las Expropiaciones
El médico francés Nicholas Leblanc, uno de los pioneros de la química científica, era propietario de una fábrica de carbonato de sodio, indispensable para fabricarpapel, vidrio y jabones, establecida en los suburbios de París. La industria prosperó, hasta que en 1794 el gobierno revolucionario confiscó la fábrica. Napoleón Bonaparte se la devolvió en 1801,pero su estado era deplorable; el llamado “padre de la química industrial” no contaba con recursos para restaurarla. Una crisis emocional lo llevó a ingresar al asilo de St. Denis; por depresión sesuicidó en 1806.
En el año en curso, el gobierno ha expropiado 384 compañías, sin tomar en cuenta las fincas; la cifra supera en un 64% las acciones similares del año pasado. Según la fuente−Conindustrias− en la mayoría de los casos se han llevado a cabo sin la debida compensación; en consecuencia, consisten en arbitrarias confiscaciones.
Al inicio de la embestida contra la propiedad privada, lostrabajadores la respaldaron; alucinados por el discurso demagógico del poder la suponían una medida favorecedora de sus intereses; pero no transcurrió mucho tiempo sin que se les hiciera evidente que enVenezuela la expropiación es una comedia, o mejor: una farsa de escarnio. Bajo el régimen de propiedad privada los trabajadores tenían ventajas que desaparecieron con el cambio, principalmente, elderecho a organizarse según su voluntad y de discutir sus condiciones de trabajo; salarios que antes se pagaban en los plazos previstos, se han vuelto irregulares; la huelga es otro derecho negado y laprotesta por el engaño se califica de traición al “proceso” y hasta a la Patria. Los trabajadores ven cómo empresas florecientes se han vuelto inoperantes o arrojan pérdidas y progresivamente sedesmoronan, tanto en su capital, corroído por la corrupción de la nueva clase dirigente, devorado por la burocracia y la masa de supernumerarios que cobran sin trabajar a cuenta de declararse chavistas,...
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