Un aproximación hacia la comunicación política

Una aproximación hacia la comunicación política

Si se buscan definiciones simples y acabadas sobre la política, creo que su mejor aproximación consistiría en decir que es el arte de construir consensos. Todo el tiempo se está, cual equilibrista, tratando de balancear las relaciones de consenso frente a las de disenso entre tres actores centrales de la arena pública: los políticos, los medios ylos ciudadanos.
Está tríada se equilibra, se desequilibra, se tensa, se flexibiliza, de acuerdo a los intereses en pugna de cada cual o las afinidades o disparidades entre los niveles de realidad y percepción de unos frente a otros. Una buena forma de entender este proceso sistémico y relacional es a través de la figura que Luciano Elizalde (2008) propone: la del espiral del consenso y disenso.Lejos de configurarse como una espiral lineal y coercitiva de la comunicación al estilo de la del silencio de Noelle-Neumann, este esquema de pensamiento da cuenta de mecanismos implícitos que aceitan u obstaculizan (por su escasez o anulación) la ingeniería política. A saber: reputación, credibilidad, legitimidad, confianza e institucionalidad.
Elizalde destaca que “el desarrollo del proceso deconsenso-disenso es un intento de pensar una serie de fases o niveles que permitan construir modelos de acciones o de efectos, para que ayuden a pensar en modelos de políticas que puedan hacer que se salga de los efectos más negativos. Este proceso de espiral de consenso-disenso comienza con los cambios en la reputación de un agente responsable de la política del Estado. En el muy corto plazo,siguen los cambios sobre la credibilidad que la reputación origina y sobre la legitimidad que esta credibilidad le ayuda o le impide conseguir (…)”. (Elizalde, 2008; 168)
En momentos de campaña electoral, este proceso de suba y baja de reputación, que se puede traducir en aumento o disminución de la credibilidad, que influye en la suba o baja de legitimidad, que produce el aumento o disminución deinstitucionalidad, puede reactivarse y desencadenarse con una velocidad y un impacto que pueden provocar la victoria absoluta de un candidato o el fracaso y ocaso rotundo de un dirigente. Pero este mecanismo necesita insumos para activarse, y uno de los más efectivos es el escándalo.
Prendida la mecha del escándalo, la espiral empieza a funcionar y la reputación es el dispositivo que se pone enjaque, y que “si se lleva a un extremo, la espiral termina en un proceso de plena confianza o de desconfianza que fortalece o erosiona el proceso de gobernabilidad” (Elizalde, 2008; 166).
Si buscamos un caso de estudio para analizar de qué modo en el corto plazo un escándalo o hecho “extraordinario” (en el sentido de fuera de lo ordinario) y, por tal condición, mediático, amenaza con dar vuelta elescenario político previsto para un candidato o un partido, podríamos coincidir en que la situación representada en la película Mentiras que Matan es un buen ejemplo que involucra diversas dimensiones del problema consenso-disenso. Un escándalo sexual del entonces presidente estadounidense a punto de estallar y a días de que finalice el último tramo de su campaña para la reelección, activa laespiral del disenso inmediatamente. La reputación pública y social del primer mandatario parece tambalear, y con ello tirar por la borda, por ese escándalo puntual, los años de construcción de credibilidad y confianza con la sociedad. Y lo peor: en medio de un proceso electoral y con una oposición sedienta de recibir materiales para explotar y diezmar la imagen positiva del presidente-candidato. Noqueda otra: hay que gestionar la legitimidad nuevamente y con premura electoral, porque en momentos críticos el consenso adquiere peso determinante.
La dimensión eficaz y ética de la reputación del presidente está en cuestión, y por tanto se debe apelar a la credibilidad, que es el segundo mecanismo comunicacional para conseguir consenso o salir de situaciones contrarias al disenso.
Y como la...