Una experiencia literaria con adultos mayores

Una experiencia literaria con adultos mayores
Indagar a la literatura como práctica fuera de la academia, fuera de las instituciones desde dónde generalmente se la interroga, es intentar una respuesta sobre qué significa, qué implicancias tiene esta práctica, para el lector no especializado . Es decir, qué representación tiene de la literatura, qué lee, por qué, para qué, y cómo lee, este tipode lector.
Estas preguntas parten del hecho paradójico de que al mismo tiempo en que los discursos a favor de la lectura y la escritura parecen proliferar, proporcionalmente parece aumentar la queja y el malestar de los profesionales relacionados con la promoción de la lectura, por "lo poco que se lee", enunciado que no remite sólo al ámbito educativo.
Como parte de un proyecto depromoción de la lectura y escritura, desarrollado en la cátedra de Planificación Didáctica y Prácticas de la Enseñanza en Letras, de la Facultad de Humanidades y ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, esta inquietud me ha llevado a relacionarme con los integrantes de un centro de jubilados, quienes en su mayoría no contaban a la literatura como una actividad posible en suvida cotidiana, para indagar sobre el sentido que esta práctica podía tener para ellos. Esta decisión de darle voz a un grupo social tan alejado de los ámbitos institucionales, se basa en la creencia de que sólo de esta manera es posible establecer cual es la importancia que tiene la literatura en la vida cotidiana de estos sujetos, más allá de los discursos a favor de la lectura como prácticasocial; y en que sólo una vez que se halla establecido el grado real de incidencia de estas prácticas culturales, será posible tomar una decisión acerca de su promoción.

Relato de la experiencia.
El lugar en el que se esta desarrollando esta experiencia es un centro de jubilados llamado “Siempre Juntos”, en un barrio de la ciudad de La Plata, provincia de Buenos Aires. Este centro fuefundado por sus integrantes actuales, quienes también han conseguido el espacio físico para sus actividades. Esta compuesto por hombres y mujeres, (aunque en nuestra actividad, participan más mujeres que hombres) con un promedio de sesenta y cinco años, jubilados, cuyas actividades principales se centran en el juego (cartas, bochas, etc), salidas a diferentes lugares de la ciudad y del país yreuniones cotidianas. En los sucesivos encuentros se ha ido manifestando una clara conciencia de grupo, con una fuerte carga afectiva entre sus componentes y un orgullo muy fuerte por pertenecer al mismo. En varias ocasiones se nombran a sí mismas como “mis compañeras”, “mis amigas”, “mis hermanas”, en otros momentos han caracterizado al grupo como “mi única familia”, y también dieron cuenta delefecto que esto ha producido en ellas, “gracias al grupo volví a vivir”, “con las chicas conocí muchos lugares, volví a salir de mi casa...”
En una primera reunión se les presentó el taller de literatura como propuesta de trabajo y se les pidió que manifestaran su opinión sobre la actividad en sí, y la literatura en general, de esta manera encontramos representaciones heterogéneas, en cuanto a laconcepción y el contacto con esta práctica específica.
Al grupo pertenecen dos maestras (una maestra jardinera, y una maestra de grado, “maestra de villeros” según sus palabras), ambas jubiladas, ambas escriben y a las dos se las reconoce en el centro como “las escritoras”. En el caso de la maestra de grado, al presentarse se posicionó fuertemente, por lo que rescato algunas de sus palabrase ideas. En primer lugar nombró su práctica educativa, subrayando, con orgullo, su actividad en villas miseria, luego al hablar de su práctica de escritura nos aclaró: “escribo ahora, y porque me gusta, yo antes no escribía... nunca escribí un discurso para la escuela, y los discursos de mis compañeras siempre me aburrían... yo llegué a escribir jugando con las palabras...”, también hizo una...