Violencia de genero

-------- (1996), “El concepto de lectura de la situación en ciencias sociales. I y II parte”, en revista Revueltas, núms. 20 y 21, agosto-septiembre, Universidad Juárez del Estado de Durango.

Roberto Manero Brito
Raúl Villamil Uriarte

EL EJERCICIO DE LAS PRACTICAS GRUPALES profesionalizadas ha variado en los últimos treinta años de manera significativa. El desarrollo de las formas deaprendizaje grupa1, de aprendizaje en grupo, de terapias en y de grupo, así como los métodos y técnicas de investigación que utilizan dispositivos grupales, han propiciado la multiplicación de las variedades de trabajo grupal, de sus finalidades, así como de los supuestos teóricos metodológicos que lo sustentan.
Desde mediados de la década pasada, la quiebra de las ideologías socialistas, el ascensodel neoliberalismo y su proyección en la esfera del conocimiento, generaron el dominio de perspectivas que relevaban de manera especial las perspectivas individualistas en la comprensión y definición de las problemáticas de las ciencias sociales.
UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA UNIDAD XOCHIMILCO División de Ciencias Sociales y Humanidades Departamento de Educación y Comunicación
Enpsicología, los desarrollos de una psicología social que rebasara una concepción de lo social y lo colectivo construidos de manera diferente a la interacción entre individuos, que no tomaran al individuo como punto de partida, fue cediendo el terreno a diversas formas de psicologismos, desde la simple proyección de mecanismos individuales en lo social, hasta formas más refinadas, en las cuales laconcepción de flujos colectivos y anónimos, el devenir histórico, se encuentra sustancialmente sustituida por la lógica de los mecanismos inconscientes proyectada sobre los procesos sociales (Villamil, 1996:542).
Jaques Guigou, sociólogo francés simpatizante de la corriente del Análisis Institucional, muestra cómo esta nueva vigencia de las perspectivas de análisis individualista no se encuentraexenta de la reedición de viejas tautologías:
Después de 1968, “lo nuevo” aparece bajo la forma del individuo que se autonomiza. […] Lo que el proletariado ha perdido de presencia histórica negativa, el nuevo individuo-democrático lo ha ganado en representaciones de lo actual y en mediatizaciones de las apariencias. Desde entonces “lo nuevo” no es otra cosa que una de las figuras centrales de lainstitucionalización del movimiento real del sesenta y ocho; es decir, la represión de su contenido histórico (la realización del ser-comunidad del hombre) por medio de la autonomización de un individuo particularizado en “liberaciones” (liberaciones de niños, de mujeres, de sexos, de edades, del trabajo, de las regiones, de los ruidos ambientales, de las creencias, etcétera) […] Sobre la vertientecientífica de este proceso, el ascenso irresistible de los liberalismos epistemológicos (Popper), de los racionalismos pragmáticos (Wittgenstein, Círculo de Viena) y de los “individualismos metodológicos” (Olson, Goffman, Shutz, Boudon) se realizó en interacción con la individualización del vínculo social, invocándolo y acompañándolo a la vez [Guigou, 1990:102] .
El devenir histórico sustituido poruna lógica de interacción entre individuos, las contradicciones sustituidas por la figura de la paradoja, muestran que la modernización del pensamiento impulsada por estos nuevos tautólogos nos lleva a una especie de inauguración de la ciudad de los egos.
En la conferencia que dictó sobre la intencionalidad de su obra durante la ceremonia de aceptación del doctorado honoris causa que le otorgó laUAM, Serge Moscovici colocó su pensamiento del lado de la tradición de la preeminencia de lo colectivo sobre lo individual. El desarrollo que realizó Moscovici sobre la pertinencia de su obra lo llevó a buscar sus orígenes desde el pensamiento junguiano, pero advirtió sobre una lejanía mayor de las raíces del pensamiento sobre la existencia de un inconsciente colectivo. Si bien no identifica...