ACHILLI

 ACHILLI:
Escuela , familia y desigualdad social. Una antropología en tiempos neoliberales

En este capitulo intenta particularizar el sentido de la escolarización indígena en un contexto de transformaciones- las políticas educativas y en el aumento de las desigualdades sociales- como ha sido la década de los 90.
El eje que guía este capitulo es analizar los diferentes sentidos que se vanconstruyendo/disputando en torno a las propuestas de interculturalidad que se despliegan en una experiencia concreta desarrollada en la ciudad de Rosario con migrantes indígenas tobas o Qom, durante esa década. Intenta analizar las practicas y significaciones cotidianas que construyen los sujetos escolares-indigenas y no indígenas-en el ámbito de políticas educativas estatales que las propugnan.
Laexperiencia de vida urbana supone-para los toba-complejos procesos en los que se entrecruzan sus nuevas condiciones de vida con otros procesos socioculturales que remiten, conflictivamente, a las distintas transformaciones que viven y, a la vez, a las configuraciones de un “nosotros” en torno a cierta “comunidad” generada desde algunas “tradiciones” seleccionadas. Entiendo estos procesos de“construcción comunitaria” como posibilidad de anclar determinadas identidades políticas desde las cuales estos pueblos indígenas demandan educación.
Creación de una escuela bilingüe en los 90.
LOS TOBAS EN LA CIUDAD. PROCESOS MIGRATORIOS Y CONSTRUCCION DE “COMUNIDAD”:
Históricamente, la construcción del estado-nacion argentino significo un proceso en el que, los pueblos indígenas, fueron “expulsados” detal constitución. Un proceso estructurado mediante la combinación, por un lado, de pacificaciones militares y, por otro, de configuraciones ideologicas de una argentinidad en las que estuvieron neutralizados los pueblos originarios. A fines del siglo XIX y principios del XX, las campañas militares exterminaron gran parte de esas poblaciones, y las que sobrevivieron, fueron arrinconados en losmárgenes menos productivos del país.
Asi, de antiguas bandas cazadoras y recolectoras se vieron obligados a incorporarse como mano de obra temporaria, en relaciones salariales de explotación.
Ya sea desde la idea del crisol de razas o desde la dualidad de criollos e inmigrantes europeos, lo cierto es que se genera una conformación sociopolítica del país que negó a sus población originaria.
La fuerza delmito del “crisol de razas” fue negado y neutralizando una diversidad socioetnica que no obstante forman parte de ese país .
la confluencia de algunos procesos. Por un lado, por la presencia cada vez mayor en los centros urbanos, a los que llegan en sus migraciones buscando mejores condiciones de vida. Un proceso en el que nuevamente, son expulsados de sus lugares de origen por la situación depobreza en la que viven. Por otro lado, un proceso de visibilizacion por parte del estado que “reconoce la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos según la nueva constitución del 94 y les garantiza un conjunto de derechos, entre los que figuran los educativos, tal como también se contemplan en la ley federal de educación del 93. Una visibilidad publica que, a su vez, seexpresa en las luchas que los mismos grupos indígenas desarrollan por sus derechos.
Los procesos migratorios de las familias indígenas-supone, configurar/se en ese nomadismo de la pobreza que penetra y recorre la vida urbana de los des-poseidos. Implica ingresar en esa cotidianeidad de un nomadismo étnico. Nomadismo obligado ya que, en sus lugares de orígenes, “ya no hay nada” y solo restamigrar. Un nomadismo que disgrega a la familia y no resulta fácil para ninguno de los integrantes del grupo familiar.
En efecto, se trata de un nomadismo ligado a la permanente búsqueda por la supervivencia que obliga a los sujetos a tales desmembramientos familiares.

CONSTRUYENDO UN “NOSOTROS” ETNOPOLITICO
En la vida urbana, los indígenas configuran distintos procesos de etnicidades en los que...